La magistrada uruguayense entendió en su momento, que el acusado de abusos sexuales debía recibir otra condena.
El vocal de la justicia provincial, Fernando Martínez Uncal, respaldó ayer el fallo emitido días atrás por la juez Melisa Ríos; quien en su momento decidió no homologar un acuerdo abreviado para un hombre, acusado de haber abusado sexualmente de una sobrina menor de edad. La defensa del presunto abusador apeló y la presentación fue finalmente desestimada.
La representante judicial entendió que el sujeto, de 49 años, había cometido hechos demasiado graves y con visibles consecuencias para la víctima, por lo tanto se debía imponer una pena mayor a la propuesta.
Esta acción judicial atrajo de manera inmediata la atención periodística de la ciudad y la provincia, ya que no suelen darse a conocer reacciones como estas dentro de este ámbito. Tal vez ocurren más seguido de lo aparente y no se difunden; pero la mayoría de las veces, cuando las partes arriban a un acuerdo, es muy difícil que un juez obre de la manera que lo hizo Ríos.
El hombre era tío de la víctima y aprovechándose de esta condición de familiar, se las ingenió para realizar reiterados y permanentes abusos sexuales contra la joven, que en ese entonces tenía entre 7 y 11 años de edad. Con el tiempo, la víctima pudo contar la verdad y así arribar a un juicio, que seguramente debe ser desgastante en muchos aspectos; pero una vez que se llega hasta esa instancia, siempre es positiva una condena que deje la sensación de justicia y no de impunidad.
En este contexto; Alejandro Felipuzzi, abogado de la joven que hoy tiene 18 años; Albertina Chichi, fiscal de la causa; y Valeria Irel, representante del acusado; habían acordado una pena de cumplimiento condicional. Aparentemente el argumento de la defensa de la víctima, habría sido que no consideraba necesario seguir exponiendo a su clienta a la continuidad de la causa.
Durante la misma jornada en que se conoció que Melisa Ríos no iba a homologar el acuerdo al que habían llegado las partes, la defensa del acusado anunció que apelaría la medida y tras hacerlo recibió un nuevo revés judicial.
Luego de lo resuelto por Martínez Uncal, la fiscalía deberá volver a tomar la causa y avanzar con una posible imputación por el delito de “Abuso sexual gravemente ultrajante, agravado por la situación de guardador”.