Cientos de personas se concentraron en el Obelisco para pedir justicia por la muerte de Diego Armando Maradona. Ante la aglomeración la exesposa del mejor futbolista de la historia, Claudia Villafañe, y sus hijas Dalma y Gianinna, decidieron retirarse del lugar apenas un cuarto de hora después de las 18.
Claudia y sus hijas llegaron vestidas con remeras que decían «Justicia por Dios», y con una bandera que pedía «Condena social y judicial para los culpables». También ingresaron a la Plaza de la República otra expareja de Diego, Verónica Ojeda, y el pequeño hijo de ambos, Diego Fernando. Y exfutbolistas muy cercanos a Maradona como el exarquero Sergio Goycochea y el exdelantero Claudio García.
La concentración emotiva también hubo instantes de tensión y hasta robos a periodistas que fueron a cubrir.
A tres meses y medio de la muerte, la causa que investiga las circunstancias tiene a siete profesionales de la salud investigados por posible “homicidio culposo”, y los fiscales de San Isidro aguardan los resultados de la junta médica para establecer si hubo mala praxis y definir la responsabilidad de cada uno y si se puede imputar a más personas.
El expediente lleva 8.000 fojas con informes médicos e historias clínicas, y miles de mensajes de texto y audio bajo análisis.