El arte hace que las calles sean más seguras al “aumentar la visibilidad de los cruces y de las sendas peatonales” y “animar a los conductores a reducir la velocidad”. Es la conclusión de un estudio realizado por la organización Bloomberg Philanthropies, que examinó 17 sitios durante dos años, antes y después de que fueran pintados con “arte de asfalto” (arte en calles, puentes, veredas y pasos subterráneos). El estudio encontró una disminución del 17% en el total de choques y una baja en la gravedad de los accidentes que ocurrieron. Hubo un 37% menos de choques que resultaron en lesiones y un 50% menos de choques que involucraron a peatones y ciclistas. Los sitios, repartidos en cinco estados de EE.UU., se consideraban en áreas con una alta densidad de población (incluidos dos en la ciudad de Nueva York). La razón parece estar en que estos proyectos crean la sensación de que el espacio público pertenece a todos.
