La CARU arribó a los 43 años de vida institucional

Se trabaja en cuestiones de navegabilidad y preservación.

El organismo binacional dio a conocer los ejes fundamentales de su gestión centrada en
el río Uruguay.

La Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU) alcanzó los 43 años desde su creación. Pese al contexto sanitario signado por la pandemia de covid-19, sostuvo el trabajo en los ejes fundamentales del organismo binacional: la navegabilidad del río Uruguay; la protección y cuidado del ambiente, la preservación de su fauna ictícola y la gestión de sus puentes internacionales.
En noviembre de 1978, los Ministros de Relaciones Externas de la República Oriental del Uruguay y de la República Argentina procedieron al intercambio de notas donde dejaron formalmente instalada, el 22, la Comisión Administradora del Río Uruguay con sede en Paysandú. Sus funciones surgen de las encomiendas del estatuto del río Uruguay, suscripto por ambos gobiernos el 26 de febrero de 1975. Aún en tiempos de pandemia, la CARU viene trabajando firmemente en sostener los pilares fundamentales del organismo binacional: por un lado, garantizar la navegabilidad del río Uruguay al mismo tiempo que se desarrolla un minucioso trabajo de control, cuidado y protección del Ambiente.
Además, la preservación de la fauna ictícola del río y la gestión de los puentes internacionales que tiene a su cargo; tampoco se detuvieron en este tiempo.

Los ejes
Reconociendo la importancia de la navegabilidad del curso fluvial, se encuentra en desarrollo el mantenimiento del dragado de profundización y balizamiento del río Uruguay entre el kilómetro 0 y el 206,8, en el puerto de Paysandú.
Esta obra ha garantizado la navegabilidad del río Uruguay, impulsando notablemente la actividad de los puertos de Concepción del Uruguay y de Paysandú. Aún en un contexto sanitario y económico adverso, se mantuvieron y ampliaron los planes de monitoreo integral del río, implementando las encomiendas de los Estados para el cuidado y control de la calidad de las aguas compartidas.
El Comité Científico de CARU continúa los monitoreos en la planta UPM y en la desembocadura del río Gualeguaychú, al igual que el monitoreo de la calidad de las aguas, del sedimento y de la biota a lo largo de los 498 kilómetros del río Uruguay compartidos por Argentina y Uruguay.
A ello se sumó el monitoreo de los afluentes y descargas de establecimientos industriales, agrícolas y centros urbanos que realicen evacuaciones significativas al río Uruguay.
En otro de sus ejes, la CARU tiene en ejecución el Programa de Conservación de la Fauna Íctica y los Recursos Pesqueros del Río Uruguay.
El objetivo principal es la obtención de información básica que permita la administración de la fauna ictícola del río Uruguay, en base a criterios científicos, procurando que su explotación sea racional y sustentable, así como fundamentar posibles medidas de protección de la fauna íctica. Está dividido en seis subprogramas que se ejecutan a lo largo del año.
La CARU es responsable, además, de la gestión de los puentes internacionales General Artigas (Paysandú-Colón) y Libertador General San Martín (Gualeguaychú-Fray Bentos).
Las medidas sanitarias de los gobiernos de Argentina y Uruguay han limitado el tránsito fronterizo, pero la actividad en los puentes se mantuvo por el tránsito comercial internacional.
Además, se avanzan en gestiones tendientes a obtener el financiamiento para el proyecto del Puente Monte Caseros – Bella Unión, que sería la cuarta unión física entre Argentina y Uruguay y para el cual CARU ya elaboró el proyecto.