El Gobernador afirmó que se conversa con los intendentes para evitar que “se puedan generar eventos que hagan peligrar la situación sanitaria”.
El gobernador Gustavo Bordet insistió en que se debe reducir la circulación innecesaria de personas para evitar contagios de covid. “Se está conversando con intendentes para evitar que se puedan generar aglomeraciones, fiestas y eventos que hagan peligrar la situación sanitaria”, sostuvo.
Acerca de las medidas por la segunda ola de Covid, el mandatario dijo que «Entre Ríos ya tiene implementada restricciones en horario nocturno, de lunes a jueves desde la 1 hasta las 6, y los fines de semana desde las 2 de la madrugada hasta las 6», y agregó: «Lo que queremos es poder tener niveles de actividad abiertos, la economía y el turismo activos, pero necesitamos reducir la circulación innecesaria de las personas o la realización de fiestas”. Bordet dijo que “en Entre Ríos hay un protocolo vigente que establece con exactitud cuántas personas pueden participar por evento, que es lo mismo que nación, hasta 100 personas en espacios abiertos”. “Si hay intendentes que habilitan eventos con más de 100 personas al aire libre y mucho más en lugares cerrados, son pasibles de cualquier acción judicial que pueda devenir en este sentido”, explicó el gobernador, al tiempo que agregó que “si bien los municipios son autónomos, se está infringiendo un decreto de necesidad y urgencia nacional que establece estos parámetros y a los cuales la provincia ha adherido”. “(…) Hay una situación sanitaria que nos preocupa mucho porque vemos lo que está pasando en Uruguay, en Brasil, en Chile, en Paraguay, donde están colapsados los sistemas de salud y queremos evitar en el futuro nuevas restricciones”, concluyó.
“La segunda ola llegó, las medidas siguen sin aparecer”
Nadia Burgos, la dirigente entrerriana de la izquierda, cuestionó las políticas de prevención en la provincia y dijo que hay que sostener la salud y la economía desde una perspectiva obrera. “Pasó el fin de semana largo y en nuestra provincia se evidenció la ausencia de políticas públicas de prevención y cuidado frente a la segunda ola. Fiestas multitudinarias sin protocolos impulsadas por funcionarios municipales, como en Santa Elena y Crespo, y turismo sin control sanitario en las fronteras, fueron las dos caras concretas de una lógica transversal de los partidos del régimen”, dijo Burgos.