Luego de haber calado hondo en la opinión pública de la ciudad, agentes de prefectura y personal municipal trabajaron de manera conjunta durante los días feriados, para continuar haciendo efectivo el desalojo ordenado por la justicia federal el viernes último.
Según un escrito enviado a la redacción de la Calle, durante este martes y miércoles se realizaron las tareas de limpieza y “cicatrización“, en el sector costero que comprende desde la ex cantina 4 de Banco Pelay hasta La Toma.
De acuerdo a un comunicado oficial emitido por el municipio, la intención es garantizar la integridad de los ambientes, ya que es un patrimonio natural de todos los uruguayenses. De esta manera se le dio inicio al cumplimiento de la orden de allanamiento dispuesta por el Juzgado Federal Nº1, a cargo de Pablo Seró, ante una denuncia del Intendente Martin Oliva, por la violación de normas que resguardan el medio ambiente. En especial la Ley 26.331, que es la que protege los bosques nativos.
El personal a cargo del municipio comenzó con las tareas de remoción, limpieza y cuidado ante el desmonte cometido por personas aún no identificadas a la orilla del río Uruguay.
Ahora resta saber si esta iniciativa avanza y se logran recuperar terrenos ocupados en zona de Paso Vera y el acceso a Banco Pelay, donde funciona una guardería que no estaría en regla.
