La foto del día

Una niña es vacunada mientras recibe el afecto de un perro, cruza de caniche y golden retriever, de la Policía Metropolitana de Indianapolis. Los “animales de compasión” brindan consuelo a las personas que han experimentado eventos traumáticos. Hasta el momento parecen ser efectivos, tanto como sus congéneres que muerden, mutilan y mandan al hospital a miles de sospechosos de delitos menores -muchos de ellos desarmados-, y hasta por simples infracciones de tránsito. Los perros en EE.UU. han servido como instrumentos de violencia en incidentes que se remontan a los días de la esclavitud. Pero en ninguna ciudad importante es más probable que alguien sea mordido por un perro policía que en Indianápolis. Su tasa es de 28 mordeduras por cada 100.000 habitantes. Le siguen Chicago, Filadelfia y San Francisco con 1 cada 100.000. Más de la mitad de las personas que fueron mordidas era negras, un número desproporcionadamente alto para una población que representa sólo el 28% de la ciudad.