Los hechos ocurrieron en una zona céntrica, durante la madrugada del domingo y no hay noticias de los ladrones.
Desde hace tiempo que el delito contra la propiedad privada es frecuente en diferentes zonas de la ciudad; pero empieza a ser cada vez más alarmante, por la impunidad de quienes ingresan a diferentes viviendas o comercios con fines de robo y no son atrapados.
En este contexto, durante la madrugada de este domingo, al menos tres comercios céntricos de la ciudad fueron violentados. El caso más notorio se dio a menos de una cuadra de plata Ramírez, sobre 9 de Julio 791; mientras que el segundo ocurrió a doscientos metros de la Jefatura Departamental Uruguay, en la esquina de Alem y San Martín; y el escenario del tercero fue en peatonal y Leguizamón.
De los tres lugares mencionados, la comerciante que tiene su emprendimiento en 9 de Julio 791, dialogó sobre lo ocurrido con los colegas de Somos Concepción y la redacción de La Calle desgravó sus declaraciones para trasmitir lo ocurrido a sus lectores.
“El domingo a las 7:23 de la mañana me desperté con un llamado de la policía. Me dijeron que estaban en la puerta de mi negocio, debido a que había un vidrio roto”, comenzó relatando la damnificada.
“Cuando llegué me encontré que había un vidrio de la puerta roto. Ingresaron por ahí y revolvieron bastante, principalmente donde consideraron que podía haber plata. Evidentemente no estuvieron mucho en el local, pero sí bastó para que se lleven cosas”, agregó la entrevistada.
“Lo más preocupante de todo es que hubo tres locales en cinco cuadras a la redonda, que fueron violentados durante la misma madrugada. No tengo especificado si en todos robaron, pero sí fueron violentados en una zona muy céntrica de la ciudad. Me parece un poco mucho”, reflexionó la mujer.
“Tengo un local chico y lamentablemente soy muy confiada, por lo tanto voy a tener que rever ese comportamiento. Por otro lado, tenemos que ver qué medidas de seguridad debemos tomar de ahora en más”, adelantó la responsable del comercio al que ingresaron lo ladrones. “Lo más preocupante no es el robo que sufrí, preocupa la cantidad de locales violentados y todavía no tenemos certezas de a qué hora fue. A mí me llamaron el domingo de mañana, porque encontraron el vidrio robo; pero nadie escuchó ni vio nada”, finalizó la mujer que aún aguarda respuestas y novedades del caso.