Vicentico cerró el ciclo que marcó el regreso del público presencial

Para que el evento fuera posible, debieron aplicarse estrictos protocolos sanitarios que configuraron un panorama y comportamientos en la audiencia muy diferentes a los habituales en los conciertos en vivo.

Con una versión acústica de Siguiendo la luna, clásico de Los Fabulosos Cadillacs, tras poco más de una hora y media de concierto, Vicentico cerró el Festival Sonoriviera, que marcó el regreso del público presencial y de pie tras la suspensión de espectáculos por la pandemia de coronavirus, en Mandarine Park, ubicado en la zona porteña de Costañera Norte. El destacado concierto que el intérprete ofreció junto a su notable banda se sumó a los realizados en jornadas anteriores por Emmanuel Horvilleur, Conociendo Rusia, Bándalos Chinos, Soledad y Airbag, para redondear el Festival que llevó nuevamente a espectadores de pie frente a un escenario luego de las iniciáticas experiencias de “auto-conciertos” de los últimos meses. Paradójicamente, el concierto de Vicentico estaba programado para el 10 de diciembre como apertura del ciclo, pero debió ser postergado debido a que el artista había mantenido en esos días un contacto estrecho con una persona infectada de coronavirus. Para que estas presentaciones fueran posibles debieron aplicarse estrictos protocolos sanitarios que configuraron un panorama y comportamientos en la audiencia muy diferentes a los habituales en los conciertos en vivo.
La instalación de corralitos, un sistema de delivery para evitar colas en los puestos gastronómicos, y reglas claras y precisas para utilizar los sanitarios además del consabido control de la temperatura corporal al ingresar al predio, fueron algunas de las particularidades de la velada. En tal sentido, a pesar de los esfuerzos de artistas y de la palpable ansiedad del público por volver a experimentar la sensación de la música en vivo, las nuevas disposiciones dotaron de un color muy diferente a la conocida liturgia que solía ponerse en acción en cada concierto, algo que se refleja de manera mucho más marcada en los casos de predios al aire libre.