Luego de su despedida de Crónica HD, en donde trabajó poco más de 4 años, Esteban Trebucq concretó su desembarco a A24 con La cruel verdad, tal como se llama su nuevo ciclo. Como guiño a su pasado reciente, una típica placa roja estalló en la pantalla mientras el estudio lucía totalmente vacío. “Trebucq está demorado”, se leía en letras blancas sobre fondo rojo, al estilo del canal fundado por Héctor Ricardo García. “Estaría incomunicado”, informaba en potencial otra placa. “No responde llamados. Ampliaremos…”, cerraba, siempre a la usanza de Crónica. De golpe, el conductor aparece corriendo y algo agitado en el estudio. “¿No hay agua, che? Vine corriendo. Qué mala onda. Perdón, se me hizo tarde, estaba tratando de organizar el país”, se justificó Trebucq de manera irónica sobre su tardanza. “Tranquilos muchachos, recién llego, trátenme bien. Estaba tratando de armar el país, pero claro: es un quilombo… ¿Se puede decir ‘quilombo’ o no? En el otro lugar me dejaban…”, les preguntaba a las personas a su alrededor y fuera de cámara. En el zócalo se leía “El país que no encaja”, título del editorial que Esteban desarrolló en el comienzo de su flamante ciclo.