El kirchnerismo quiere que asuma la camporista que reemplaza a Edgardo Kueider en el Senado. “No habrá sesiones extraordinarias hasta que Stefanía Cora tenga su banca, advierten.
Victoria Villarruel estaba en su despacho este jueves cuando la sensación térmica en Capital Federal superó los 37° pero no había un solo senador en la Cámara Alta y no está claro cómo se avanzará con el tratamiento del pliego de Ariel Lijo que el Gobierno dispuso que se trata en las sesiones extraordinarias que van del 20 de enero al 20 de febrero.
El interbloque peronista, conducido por José Mayans y Juliana di Tullio, mantiene el reclamo con que se despidieron en diciembre: no habrá sesiones extraordinarias hasta que Stefanía Cora asuma la banca en reemplazo de Edgardo Kueider, el senador detenido en Paraguay con más de 200.000 dólares sin declarar.
“Si el gobierno no deja asumir a la entrerriana, los kirchneristas dicen que no hay Senado”, resumieron en el despacho de una senadora sin techo en su provincia.
Esa situación se suma al freezer que sufre la vicepresidenta Victoria Villarruel, que complica aún más el funcionamiento del Senado. «El aislamiento total de la Vicepresidenta enoja a los más colaboracionistas, que entienden que el freezer los perjudica a ellos y terminan metidos en una interna ajena», precisaron.
Además, Villarruel ensayó una serie de movimientos para resistir las embestidas de Casa Rosada, que empezó a sitiarle el Senado desde que Santiago Caputo logró hacer pie a través del bloque Las Provincias Unidas, ahora tras la caída de Kueider liderado por Carlos «Camau» Espínola y apuntalado por el salteño Juan Carlos Romero.
La vice echó al director de Administración para poner a un hombre de su confianza, luego de que Javier Milei pidiera la cabeza de los hombres designados por su compañera de fórmula. Ahora la Vicepresidenta le arrebató competencias a la secretaria administrativa, María Laura Izzo, quien había presentado la renuncia en disconformidad con el manejo de la Cámara.
El plan del incipiente villarruelismo sería controlar módulos de los senadores a través de la auditora Iris Speroni, algo que preocupa a los legisladores. «Están pisando los contratos y no saben cómo arranca febrero», deslizaron en los pasillos del Congreso.
La discusión sobre los recursos, según confiesan cerca de un opositor, podría convertirse en un problema grave para el oficialismo, después del manoseo por las dietas que expuso a los senadores por una pelea protagonizada y divulgada por X entre Milei y Villarruel.
Del temario previsto en extraordinarias, el Senado tiene que discutir las candidaturas de (Ariel) Lijo y (Manuel) García Mansilla y la Ley Antimafias pero no hay línea del Gobierno, se quejó un senador aliado.
Una fórmula belicosa
Esa guerra entre el Presidente y la Vice es, en definitiva, la que complica el normal funcionamiento de la actividad parlamentaria.
Por eso, crecen las chances de que el vacío de poder libertario abra las puertas para el golpe del peronismo y los aliados contra el presidente provisional del Senado, Bartolomé Abdala. «Todos dicen que nadie está en esa pero todos saben que en febrero se renuevan las autoridades», desliza una fuente, y agrega: «el reparto actual fue el resultado de la mayoría de 39 antikirchneristas que armó Romero, pero eso ya se resquebrajó».
Atento al desafío, el jefe del bloque libertario, Ezequiel Atauche, habría mandado un mensaje de WhatsApp a sus colegas de bancada sin más precisiones que el aviso protocolar de la convocatoria a sesionar en verano y el pedido que «estén todos atentos».
Entre la militancia y la historia
Stefanía Cora, de 33 años, es una militante camporista y legisladora en Entre Ríos desde 2019, revalidó su mandato el año pasado y se asumiría en lugar del senador detenido en Paraguay hasta diciembre de 2025.
Su incorporación es crucial para el bloque kirchnerista, ya que sumará un voto adicional al interbloque liderado por José Mayans, elevando su número de senadores de 33 a 34. Esto los dejaría a tan solo tres escaños de alcanzar el quórum propio, una posición estratégica que les permitiría aprobar o bloquear proyectos con mayor facilidad.
La asunción de Cora requiere que se convoque a una sesión en la que se alcance el quórum necesario para tomarle juramento. Una vez cumplido este procedimiento, el kirchnerismo podrá mostrar su bloque fortalecido, siempre y cuando sus integrantes 34 integrantes estén presentes.
Cora se sumó a la organización que lidera Máximo Kirchner en 2008 y llegó a ser presidenta del bloque de concejales de Paraná, antes de integrar la Legislatura entrerriana. Como concejala, fue una férrea opositora al por entonces intendente radical Sergio Varisco, condenado por como partícipe necesario en la comercialización de estupefacientes agravado.
Desde su banca de diputada, elaboró la primera ley del sistema integrado de ciencia, tecnología e innovación de Entre Ríos y la ley de Teatro Independientemente. Además, es coautora de la Ley de Paridad Integral de la Provincia.
La futura senadora cursa sus estudios de Historia en la Universidad Nacional del Litoral, donde le quedan tres materias para obtener el diploma del Profesorado y solo dos para recibirse como licenciada.
