Se acentúa la falta de municiones en ambos bandos

Ucrania resiste gracias a las fábricas de los países occidentales.

Los ejércitos de Ucrania y Rusia están especialmente ávidos de todo tipo de proyectiles, desde balas para fusiles de asalto hasta proyectiles de 155 mm y misiles de precisión, y están inmersos en una guerra de usura de municiones, al igual que con los soldados y el equipamiento. El objetivo es durar más que el enemigo.
“Ese es el tema del momento”, confirmó un alto cargo europeo que pidió guardar el anonimato. “Es una cuestión de flujos y acciones. Lo que caracteriza un conflicto de alta intensidad es el consumo extremadamente elevado de municiones de cualquier calibre”, agregó.
En cuanto a los proyectiles, por ejemplo, según un informe del instituto británico RUSI, “Rusia lanza aproximadamente 20.000 proyectiles de 152 mm por día, comparado con 6.000 de Ucrania”.