Racing Club aplastó a Aldosivi

Alcaraz y Copetti, los goleadores de la goleada de Racing a Aldosivi.

Racing no tuvo piedad ante Aldosivi y con un nivel descomunal lo goleó 5 a 0 en un atractivo encuentro disputado anoche, en Avellaneda, por los cuartos de final de la Copa de la Liga Profesional.

Con un doblete de Alcaraz a los 3 y 11 minutos del primer tiempo y en el complemento con dos tantos de Enzo Copetti, al minuto de penal y a los 11, y Javier Correa a los 32, le dieron el triunfo al local.
Desde el inicio, Racing dejó en claro que buscaría hacerse de la victoria con un arranque frenético, en el cual con una destacable jugada colectiva, con triangulaciones explotadas a la perfección y un centro preciso de Matías Rojas, fue Alcaraz quien con un cabezazo infló la red para el 1-0 y le puso moño a una jugada espectacular.
El cimbronazo temprano para Aldosivi fue un golpe letal que lo dejó al borde del abismo, y con más orgullo propio que con juego intentó cerrarle los caminos al local manejando el mediocampo, sin embargo, cada vez que los de Fernando Gago apretaron el acelerador, rompió con esa idea y lo dejó expuesto en defensa.
En un acción de ataque por parte del elenco de Mar del Plata, Racing en el mediocampo cortó y salió rápido de contra con un cambio de frente para Tomas Chancalay, quien lanzó el centro para el ingreso al área de Alcaraz quien bajó la pelota con el pecho y con remate letal puso el 2-0.
Ya en el complemento, el entrenador del «tiburón», Martín Palermo, realizó dos modificaciones para cambiar la historia, sin embargo la sentencia llegó antes del minuto: Copetti con un ingreso furioso al área fue derribado y 60 segundos más tarde, el propio delantero con un remate ajustado venció a Devecchi y puso el 3-0.
Lejos de que el elenco visitante pudiese reaccionar, el local volvió a golpear y dejó fuera de juego a Aldosivi: Desde un tiro de esquina y tras un flojo despeje, la pelota quedó boyando en el área y ante la mirada de tres rivales, Copetti definió para estirar las cifras 4-0.
Luego de aquel tanto, la historia quedó definida y lo de Racing fue un monólogo en el campo de juego, mostró -quizás- su mejor versión, desbordando por todos los sectores del campo, generando un sinfín de ocasiones para abultar aún más el marcador.