Señor director:
El servicio de recolección de basura pasa cada vez más temprano por mi casa y con menos frecuencia de lo habitual. Vivo en una esquina y el camión solía pasar por ambas calles con una hora de diferencia, pero ahora sólo pasa una vez y muy temprano.
En muchas ocasiones los vecinos que llegan de trabajar a las 20 horas ya no pueden sacar su basura y cuando la sacan antes de irse a trabajar para intentar que el recolector se lleve los residuos; las bolsas y las cajas están tanto tiempo en la calle que son un festín ideal para los perros del barrio que se pasean hasta con pañales usados en la boca; una imagen muy desagradable, pero una especie de venganza divina para con el vecino que deja a la mascota en la calle como si fuese su patio. Estos vecinos suelen salir un ratito al día para abrazar a sus perros y sacarse fotos mientras les dan besos. Igualmente acá hay dos problemas, el servicio de recolección que a mi criterio está bajando el rendimiento y los vecinos que tiene animales abandonados en la vía pública.
Raúl Ayala
