Eran unidades nuevas, algunas llevaban motos secuestradas en distintos operativos de seguridad.
El domingo 31 de enero un convoy de patrulleros pertenecientes a la Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas (UTOI), dependiente de la Superintendencia de Fuerzas de Operaciones Especial (FOE) de la Policía Bonaerense, inició su marcha con destino a La Matanza. Habían salido de Mar del Plata.
Eran unidades nuevas, algunas llevaban motos secuestradas en distintos operativos de seguridad. La caravana procuraba viajar a corta distancia entre las unidades. A la altura de Castelli, un imprevisto derivó en un insólito choque en cadena.
Algo pasó con el conductor que viajaba delante en la caravana. Según reportaron medios marplatenses, un descuido, una distracción del policía que manejaba la primera camioneta provocó que al menos otros cinco conductores no tuvieran tiempo ni distancia para evitar el impacto. El resultado: seis unidades pick-ups marca Ford Ranger protagonizaron una extraña colisión en cadena sobre la Autovía 2.
Más precisamente, sobre el kilómetro 183, en la jurisdicción de Castelli, cerca de un reconocido parador de la Ruta 2. En virtud de los primeros informes que tomaron los medios locales, las unidades, en su mayoría nuevas, sufrieron daños de magnitudes que van de considerables a menores en el frente y en la parte trasera como consecuencia del impacto.
Uno de los efectivos que participaban de la caravana debió ser trasladado por una ambulancia del SAME al Hospital Ramón Carrillo con un fuerte dolor en el cuello. Los vehículos sufrieron averías mecánicas: presentaban hundimientos en la cabina trasera y en las parrillas delanteras, algunos tenían el capot levantado y otros emanaban humo desde el motor.
Por el choque, se detuvo el tráfico de la Autovía y tuvo que asistir un camión de bomberos, mientras los patrulleros afectados estacionaron en fila a la vera de la ruta.