Talia Szulewicz (*)
El 23 de septiembre es el Día Internacional de la Visibilidad Bisexual, fecha celebrada desde 1999 con el objetivo de impulsar la inclusión, aceptación y el respeto hacia las personas de esta orientación sexual.
¿Por qué es necesaria la visibilidad? ¿Y qué podemos hacer desde los espacios laborales para garantizar la inclusión?
Para contextualizar, según una encuesta realizada por la Consultora Nodos, en 2020 más de 1 de cada 4 personas de la comunidad LGBTIQ+ sufrieron acoso, violencia o discriminación en su espacio laboral. En el caso de las personas bisexuales, el 36% de las personas encuestadas vivieron situaciones de acoso, y el 26% de las mujeres bisexuales frente al 32% de los varones bisexuales situaciones de discriminación.
Hay distintas acciones que se pueden implementar para que todas las personas LGBTIQ+ se sientan respetadas en su trabajo.
1. No suponer que todas las personas son heterosexuales: No asumir la orientación sexual de las personas. Algo tan simple como que se use el término pareja en lugar de marido, esposa, novio, novia, etc.
2. Tener en cuenta la diversidad de las familias: Es necesario dejar de pensar en la «familia tradicional» (marido, esposa e hijos) como única opción, para garantizar que las situaciones de vida de todas las personas sean validadas y reconocidas. 3. Aceptar las distintas formas de expresión: Frases como «puertas adentro que cada uno haga lo que quiera», implican la creencia de que la diversidad debe ocultarse. Es necesario que se permitan distintas formas de ser y expresarse en un ambiente de trabajo para que las todos tengan el lugar que les corresponde, sin necesidad de adaptar quiénes son.
4. Contar con políticas de igualdad de oportunidades, diversidad e inclusión: Desde las organizaciones es fundamental asumir compromisos con el colectivo LGBTIQ y que estos sean conocidos por todas las personas empleadas. Además, estos deben ir acompañados de prácticas de reclutamiento y selección libres de sesgos y estereotipos de género.
5. Generar espacios inclusivos: En ningún caso proponemos que las personas obligatoriamente tengan que exponer y hablar de su orientación sexual si no lo desean, lo que buscamos es generar espacios seguros para que nadie sienta que lo debe ocultar. La idea no es señalar a aquellas personas que no son heterosexuales, sino que la orientación sexual sea normalizada, cualquiera esta sea.
(*) Responsable de Comunicación de la ong, Grow, género y trabajo.
