Bautismo
Estefanía Rodríguez recibió los óleos bautismales en la parroquia María Auxiliadora.
Santoral
Los católicos recuerdan hoy a Marija Jula Ivanisevic y compañeras, beatas. En Gorazde, en el cantón de Podrinje Bosnio, hoy Bosnia y Herzegovina, las beatas Marija Jula (en el siglo Kata Ivanisevic) y cuatro compañeras, vírgenes de la Congregación de la Divina Caridad y mártires, muertas por la fe, en la fidelidad a sus votos religiosos.
Conocidas como las mártires de Drina, estas cinco religiosas pertenecientes a la orden de la Divina Caridad, fueron asesinadas por las milicias nacionalistas de Serbia durante la Segunda Guerra Mundial.
Ellas son Jula Ivani evi, croata, que era la superiora de la comunidad ubicada en Pale; Krizina Bojanc y Antonija Fabjan, provenientes de Eslovenia, la austríaca Berchmana Leidenix, la mayor del grupo con 76 años, y Bernadeta Banja, húngara, la más joven, con 29 años. Vivían en una población llamada Pale, ubicada al suroeste de Sarajevo que hoy cuenta con 30.000 habitantes.
Allí tenían una comunidad, llamada la Casa de María en la que se dedicaban al cuidado de los enfermos y a alimentar a los niños huérfanos de la Casa del Niño, un orfanato que pertenecía al Estado.
También daban socorro y medicina a todos los pobres y mendigos que venían de la montaña de Romanija. En 1941, después de la rendición de Yugoslavia ante los nazis, el ejército de los chetniks, bajo la idea de la creación de un gran estado serbio, quería expulsar a todos los grupos minoritarios de su territorio, incluyendo los religiosos. Muchos aconsejaron a estas hermanas huir a un lugar seguro.
Grávida
Desde la parroquia San Roque se hizo saber que, bajo el lema: ‘Vos podés cuidar más vida’, si se conoce a alguien que tiene la intención de abortar se contacten con el 3442 515482, teléfono de Grávida.