Bautismo
Ariana Jazmín Villagra recibió el sacramento del Bautismo durante una ceremonia oficiada en la parroquia María Auxiliadora.
Premio Storni de Poesía
Se abrió la convocatoria para el Premio Storni de Poesía. La iniciativa, impulsada por el Centro Cultural Néstor Kirchner y el Ministerio de Cultura de la Nación, que lleva el nombre de la gran escritora argentina, Alfonsina Storni, tiene como objetivo reconocer y fomentar la producción poética argentina. La convocatoria, de carácter federal y para la que se deberán presentar obras inéditas, cerrará el lunes 19 de abril. El primer premio otorgará un monto de $150.000. Los ganadores se darán a conocer en mayo. El jurado estará integrado por tres figuras de renombre en la poesía argentina: Estela Figueroa, Graciela Cross y Osvaldo Bossi. Se otorgará un premio de 150.000 pesos y dos menciones consistentes en un incentivo de 50.000 pesos cada una. Los nombres de los ganadores serán anunciados a finales de mayo. Para participar se debe ser mayor de 18 años, residir legalmente en la república Argentina, completar el formulario correspondiente y subir el archivo con el texto a concursar. Se acepta solo una obra por persona.
Aniversarios e imágenes familiares
Los lectores de LA CALLE que deseen enviar sus fotos referidas a cómo celebran sus aniversarios y viven la cuarentena desde sus casas pueden enviarlas –en forma gratuita- al siguiente correo electrónico: redacción@lacalle.com.ar para su publicación. En lo posible, consignar los nombres de las personas que aparecen en la imagen, el apellido de la familia y la localidad de residencia.
Santoral
Los católicos recuerdan hoy a San Prudencia de Troyers. Parece que fue el primer controversista español. Probablemente de origen pirenaico. Dejó su patria -como tantos- por la invasión de los musulmanes y buscó fortuna al otro lado de los Pirineos, al amparo de la corte de los Carolingios. Supo encontrarla y, además, su vida y ministerio sirvió como vehículo de la tradición isidoriana por tierras más allá de los montes. Amén de historiador erudito y sabio teólogo, fue obispo y santo. Mantuvo, a lo largo de su vida, con orgullo noble su condición de español. Gobernó la iglesia de Troyes, iluminándola con la doctrina y defendiéndola con su pluma. Gran conocedor de la Sagrada Escritura y consciente de que ella encierra el tesoro de la Palabra, enseñó a rezar a sus fieles con los salmos escribiendo para ellos el Breviarium Psalterii.
También divulgó el Florilegium ex sacra scriptura, un manual de ética con sentencias espigadas de los libros santos. Consiguió reunir una gran biblioteca -manía de todos los intelectuales- donde se refugiaba en los momentos libres de atenciones pastorales, para preparar otras labores pastorales futuras. Pasa ratos y, a veces, temporadas dedicados a la reflexión y el estudio. Allí pudo reunir ejemplares que encerraban gran parte del saber teológico del tiempo. Sus favoritos 34qn Gregorio Magno, Isidoro de Sevilla y San Agustín. Adquirió gran erudición eclesiástica y agudeza discursiva que le capacitaron para tomar parte en las controversias teológicas de altos vuelos que hubo en su tiempo. No extraña que conste en su curriculum de historiador y teólogo el hecho de llegar a ser capellán y consejero de Ludovico Pío y Carlos el Calvo. Troyes lo veneró como santo desde su muerte por haber sido un pastor celoso de la fe y de las almas, que supo hermanar la fuerza y rigidez de pensamiento con la blandura de un padre en sus gestos.