Bautismo
Imanol Boujón Olagüe fue ungido en la parroquia María Auxiliadora con los óleos bautismales.
Santoral
Los católicos recuerdan hoy a Domingo de Silos, santo. Su vida la escribió con devoción precisa un monje contemporáneo llamado Grimaldo, que, además, fue religioso de su casa. Nació alboreando el siglo XI en Cañas, cerca de Nájera, en el reino de Navarra; no se sabía si de cuna noble o del pueblo llano, ni si rico o pobre. Sí se le conoció pastoreando cuando niño y dado a compartir comida y leche de oveja con los viandantes. Fue apacible de carácter y mostró cierta inclinación al estudio; quizá, por eso, sus padres le orientaron hacia la clerecía que fue, en su tiempo, un modo de conseguir honores y riquezas, casi tanto como las armas, aunque él pensó más en su santificación y en la gloria de Dios que en los triunfos humanos. El obispo lo ordenó sacerdote. Pero Domingo Manso llegó a sentirse indigno y notó pavor porque era duro y muy difícil vivir en solitario tan sublime ministerio. Después de año y medio, se retiró. Entró en el antiguo y observante cenobio de San Millán de la Cogolla, tomando el hábito negro de San Benito. Los monjes de San Millán volvieron los ojos a él y le pidieron que sea su prior. Pasó de «pastorcillo» a «pastor». Y mientras cumplió ese encargo, el rey García de Navarra le pidió los tesoros del cenobio; pero dio con un compatriota que también llevó en la sangre lo que dieron la tierra y la época en cuanto a tozudez y firmeza.
Puso cara al rey y defendió lo que fue patrimonio de su casa y de su iglesia. Esta actitud le valió el destierro voluntario a las tierras de Castilla donde reinaba el hermano de don García.
El Arte de Vivir
Dada la difícil situación que atraviesa la Argentina y el mundo por la pandemia de coronavirus, la Fundación El Arte de Vivir desarrolló programas gratuitos de asistencia y ayuda para profesionales de la salud, así como en cárceles y barrios carenciados de toda la Argentina. Uno de ellos es Acción Ayudamos desde Casa: Muchos barrios, comedores y escuelas, que ofrecían dos platos de comida a niños/as y adultos, se vieron afectados ante esta situación. Gracias a la iniciativa de los voluntarios, se entregó comida a 1277 a familias de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, provincia de Buenos Aires, como Tandil, Bahía Blanca, Tres Arroyos y Paraná, Barrio 31, Barrios Saldías, Barrio Azul, Balcarce, Barrio Fraga, La Cava, Balcarce y Mar del Plata.