Nos analizan antes de tomar medidas

Señor director:
Siguen las clases virtuales y continúan los problemas de comunicación o desarrollo de las actividades. Una vez más las medidas anunciadas a nivel local en el marco de la pandemia generaron reacciones dispares. Mientras algunos reprochaban las restricciones en la ciudad, otros las respaldan por diversos motivos (haber sufrido la enfermedad en el círculo íntimo, ser paciente de riesgo o por el simple respeto a la autoridad que nos gobierna).
En lo que todos coinciden, es en que pareciera seguir existiendo un termómetro social a la hora de tomar medidas y se analiza en base a comentarios de internet.
Mientras una porción importante de la ciudad caminaba o pedaleaba alegremente por la isla del puerto, otros opinaban en redes en base a un potencial escrito que “casualmente” se filtró a las redes cerca de las 15 horas. Este texto fue pulido, levemente modificado y oficializado cuando empezaba a anochecer.
Lo que en principio parecía la continuidad de medidas más estrictas en el marco de la pandemia, terminó siendo la prolongación de las clases virtuales y el impedimento de ir con un nene a la plaza (todas las plazas están con sus juegos encintados). El resto quedó más o menos como estaba antes del fin de semana largo del 25 de mayo. Funcionan bares, gimnasios techados y otras actividades. Las escuelas siguen siendo el único ámbito sobre el cual hay firmeza para cerrar.
No tengo la menor idea de pandemia y no tengo nada que ver con la medicina, pero veo firmeza con una actividad y no tanto con otras.
Andrés Molina