Mientras el Banco Central volvió a comprar divisas, para sumar más de u$s420 millones en el mes, los dólares financieros tuvieron acotadas variaciones y se mantuvieron (por undécima jornada) debajo del tipo de cambio «solidario», en una jornada en la que se destacó la disparada de $7 del blue, que regresó a los valores de hace un mes.
En un contexto de mayor demanda estacional de pesos y bajo las continuas intervenciones oficiales, el dólar Contado con Liquidación (CCL) bajó 0,2% (32 centavos) a $140,45, lo cual dejó una brecha del 68,5%. Por el contrario, el MEP o Bolsa aumentó 0,2% (31 centavos) a $140,35, dejando un spread del 68,4%.
Los tipos de cambio bursátiles acumulan en el mes un retroceso de hasta el 5,1%, en un marco de relativa calma cambiaria, algo que se refleja en varios indicadores: en las últimas dos semanas, el BCRA no vendió dólares en el MULC, la diferencia entre el CCL y el MEP cae por debajo del 1% y la brecha cambiara CCL/oficial retrocede unos 500 puntos básicos.
Por cuestiones de estacionalidad, el último mes del año siempre registra una mayor necesidad de pesos, por ejemplo del lado de las empresas para pagar el medio aguinaldo a sus empleados.
Así, las expectativas de un ajuste en el tipo de cambio mayorista para el corto plazo bajaron: por estos días se observan menores tasas en el mercado de futuros del ROFEX-MAE desde julio y se han registrado rescates en Fondos Comunes de Inversión (FCI) de dólar linked (bonos en pesos que ajustan por el tipo de cambio), remarca un informe de Neix.
De todos modos, los operadores del mercado se muestran cautelosos con la actual «pax cambiaria», por varias señales latentes: la emisión monetaria sigue siendo alta; la inflación núcleo se aceleró al 3,9% mensual en noviembre (los precios regulados ya llevan 18 meses de atraso respecto de los precios libres, y se extendió el congelamiento de tarifas por 90 días más); y no se descarta la posibilidad de una segunda ola Covid-19, lo que presionaría a mayores estímulos por parte del BCRA.