Mató de un disparo al amigo de su hijo

Tomás Echegaray, la víctima.

Un hombre mató de un balazo a un amigo de su hijo cuando quiso hacerle una broma en la ciudad bonaerense de Tapalqué. Intentará probar que se equivocó al apretar el gatillo del arma en vez del rociador de alcohol que llevaba en la otra mano.
Si bien el imputado Néstor Félix Hirtz (66) se negó el lunes a prestar declaración indagatoria, el productor agropecuario le comentó extraoficialmente a algunos policías y a su defensa cuál era la «joda» que había planeado y que terminó con la muerte de Tomás Echegaray (26).
«Salió a recibirlo con un rociador de alcohol en una mano y el revólver 44 Magnum en la otra. Se equivocó y en vez de gatillar el alcohol, le gatilló el arma», confió a Télam una fuente de la investigación.
Por ello, el abogado de Hirtz, Gabriel Di Giulio, pidió este martes mediante un escrito presentado ante el fiscal de la causa, Marcelo Fernández, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 de Azul, que la Policía se presente en la casa donde ocurrió el hecho para secuestrar el rociador de alcohol en cuestión.
Al ser consultado por Télam, Di Giulio sólo comentó que el hecho «fue una lamentable tragedia», contó que su cliente está «conmocionado» por lo sucedido, que por ese motivo «no estaba en condiciones de declarar» en la indagatoria y que «ni bien reciba ayuda profesional y esté estabilizado, en unos días contará su versión ante el fiscal».
Hirtz continuaba detenido por la muerte de Echegaray bajo la acusación de «homicidio agravado por el uso de arma con dolo eventual», delito que prevé una pena de 10 a 25 años.
El fiscal Fernández optó por esa calificación al entender que el productor agropecuario debió haberse representado que al salir a recibir al amigo de su hijo con un arma cargada y lista para disparar, podría ocasionarle la muerte a alguien y, pese a ello continuó con su accionar y no hizo nada para evitarlo.