Más de 300.000tn de limones no se cosecharán

El limón que se exporta sólo puede cosecharse manualmente.

Estiman que unos 40.000 cosecheros se sumarán al ejército de desocupados un mes antes de lo previsto en el NOA.

La finalización anticipada de las exportaciones a la Unión Europea (UE), la caída del consumo por la crisis económica en el Viejo Continente debido a la guerra entre Rusia y Ucrania, el incremento de los costos de flete marino y los combustibles, más la baja del precio interno por sobreoferta, provocarán que alrededor de 300.000 toneladas de limones se pudran en los árboles de las fincas de Tucumán, Salta y Jujuy. Pero, además, esto anticipará en un mes la finalización de la cosecha de limones, por lo que 40.000 trabajadores del sector se sumarán 30 días antes al ejército de desocupados que suelen ser contenidos por los planes interzafra desde octubre o noviembre.
Las primeras señales de este complejo escenario ya se hacen sentir en la región. En Tucumán, de acuerdo al empresario Pablo Padilla, presidente de la Asociación Citrícola del Noroeste Argentino (Acnoa), ya se cerraron empaques porque casi no hay embarques a la UE, a donde se exporta el 60% del limón argentino. Hay envíos a Estados Unidos, Rusia, Canadá y China, entre otros países, pero de mucha menor escala.
Los niveles de operaciones fueron similares a los del año pasado pero se esperaba que fueran superiores, sin embargo, se deprimió el consumo europeo y se sumó la competencia de Sudáfrica, que tiene valores competitivos por razones de distancia, todo lo cual ha ido en desmedro de los productores argentinos.
Sin empleo en forma anticipada
La producción de limones del NOA representa el 95,6% del total nacional, del cual Tucumán produce el 87,5 %, Salta el 5,7% y Jujuy 2,4, el resto se divide entre Misiones y Entre Ríos, de acuerdo a datos oficiales.
El costo social es otro aspecto de relevancia de este complejo combo que afecta a la citricultura. Esta actividad requiere todos los años de mano de obra especializada para la cosecha porque el limón para exportación, el que llegará a las góndolas de supermercados europeos, de Estados Unidos y China, debe ser cortado de la planta de un modo especial. Ninguna máquina, hasta el momento, pudo reemplazar el trabajo de estos hombres y mujeres.
La zafra limonera ocupa a alrededor de 40.000 personas entre los meses de abril/mayo y septiembre pero al haber cerrado las ventas a los mercados internacionales un mes antes, la cosecha comenzó a apagarse y se prevé que finalice en las próximas dos semanas. implementación se haga efectiva desde septiembre.