Familiares, amigos y vecinos de Jeremías Aguiar, el niño de tres años que falleció tras ser atropellado el 26 de septiembre en el barrio Cantera 25, se movilizaron este lunes por las calles de Concepción del Uruguay para exigir justicia y la creación de una Unidad de Terapia Intensiva Pediátrica (UTI) en el Hospital Justo José de Urquiza.
La marcha comenzó en Ugarteche, continuó por Pablo Lorenz y boulevard Yrigoyen, dio una vuelta a la Plaza Ramírez y finalizó en 25 de Mayo. Durante la jornada, la madre del niño, Lucrecia Roa, expresó su dolor y su pedido de justicia:
“Estamos pidiendo justicia y también la terapia intensiva pediátrica. A Luna le dieron arresto domiciliario, y no queremos que esté en su casa. La persona que se ofreció a cuidarlo también es cómplice”, señaló.
Incidentes previos a la movilización
Minutos antes del inicio de la marcha se registraron disturbios frente a la vivienda del acusado, Diego Luna, ubicada en la zona de Teniente Ibáñez y Larroque. Según explicó Roa, algunos vecinos reaccionaron con indignación cuando la familia colocaba carteles pidiendo justicia.
“No podemos controlar lo que haga la gente. Nuestra intención no es generar daños ni complicar la causa”, aclaró la madre.
Resultados del test de alcoholemia
La familia confirmó que el test de alcoholemia del conductor arrojó resultado positivo, aunque aún no se informó el nivel exacto de alcohol en sangre. “Nos da un poco de alivio saber que se comprobó, pero no entendemos cómo puede estar en su casa”, dijo Roa.
Prisión domiciliaria para el acusado
El 24 de octubre, la jueza de Garantías Alejandrina Herrero resolvió que Diego Antonio Luna (42) cumpla prisión preventiva domiciliaria, con pulsera electrónica, mientras avanza la investigación.
Durante la audiencia, el fiscal coordinador Fernando Lombardi había solicitado que la medida se cumpliera en la cárcel, mientras que la defensora oficial Valeria Irel pidió el arresto domiciliario bajo la custodia de tres personas.
Luna está imputado por homicidio culposo y lesiones leves, tras atropellar a Jeremías cuando el niño jugaba en la vereda junto a su abuela, quien resultó con heridas menores. Según la fiscal María José Labalta, el conductor intentó escapar y manejaba en estado de ebriedad.
El reclamo por una UTI pediátrica
Además del pedido de justicia, la familia impulsa una campaña para que el Hospital Urquiza cuente con una Unidad de Terapia Intensiva Pediátrica, un reclamo que ya reunió más de 6.000 firmas.
Jeremías fue derivado al Hospital San Roque de Paraná por la falta de atención pediátrica crítica en su ciudad, pero falleció durante el traslado.
“No queremos que otro niño pase por lo mismo. Necesitamos un lugar donde nuestros hijos puedan recibir la atención que merecen”, expresaron los familiares en un comunicado.










