La desaceleración de la inflación en noviembre y las expectativas sobre el poder adquisitivo aparecen como la principal plataforma política para el reordenamiento del Frente de Todos. En Entre Ríos, Bordet confirmó que estará en la boleta y prometió internas. En el medio, el enredo judicial.
Por Mariano Osuna
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) difundió este jueves un aumento mensual del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de 4,9% en noviembre, que es el porcentaje más bajo desde febrero de este año. Las categorías que más incrementos tuvieron fueron Comunicación con 6,4%, Bebidas Alcohólicas y Tabacos con 6,3%, Transporte con 6,1%, y Bienes y Servicios con 5,8%. En contraposición, los rangos de Educación (+3,8%) y Alimentos y bebidas no alcohólicas (3,5%) fueron las que menos subieron en el anteúltimo mes de 2022.
Como anticipó Punto y Seguido, la columna política de los domingos de LA CALLE, el desenlace sobre la suba inflacionaria de noviembre era fundamental en los planes del Gobierno nacional, para iniciar un proceso de desaceleración, acompañado de la implementación de distintos acuerdos de precios con alimenticias, combustibles, calzados y medicamentos, y que tiene a marzo como mes bisagra pensando en el calendario electoral. “El objetivo es que la inflación empiece con el 3% en abril”, afirmó Sergio Massa, ministro de economía, en declaraciones radiales del día viernes. “Hace 120 días nos propusimos con medidas económicas y con acuerdos ir logrando cada 70 días una baja progresiva de la inflación”, completó el tigrense que también pronosticó que 2022 cerrará con un crecimiento económico por encima del 5% y que 2023 tendrá un desarrollo positivo del 3,5%.
Ese período que se abre de cuatro meses es el plazo final del Frente de Todos para encauzar la economía doméstica, que se vincula con la suba de los precios, especialmente de alimentos, servicios (internet, cable, luz, gas y agua), comunicación y transporte, y fundamentalmente con el poder adquisitivo de los bolsillos argentinos. El desafío principal es trasladar las buenas noticias en materia de aciertos de la macroeconomía, desde el control de las importaciones al fortalecimiento de las reservas, a las múltiples realidades de las mesas familiares. Ese factor será determinante en cualquier aspiración electoral del oficialismo, a sabiendas que tiene inherencia recíproca con el humor social.
Tras el renunciamiento de la vicepresidenta, Cristina Fernández, a participar de los comicios del año próximo, siendo la principal figura respecto a la tracción de votos, el Frente de Todos se encuentra en un proceso de debate interno que por ahora es más sectorial que mediante una mesa con todos los actores que integran la coalición. Algo similar ocurre en la vereda de enfrente, donde las fotos entre los partidos fundadores de Juntos por el Cambio parecen difíciles, incluso dentro de cada uno de ellos, con sus propias disputas de referencialidades, conducciones y candidaturas. A esa situación política, y en el caso del oficialismo también de la economía, hay que sumarle otro eje de análisis, que desarrollamos la semana pasada, sobre el Poder Judicial y su intervención en diferentes aporías coyunturales, desde el conflicto abierto del Consejo de la Magistratura, que es el organismo que nombra, ratifica y evalúa jueces y fiscales, a la problemática sobre la coparticipación surgida luego que el ex presidente Mauricio Macri decidiera el aumento de recursos a Ciudad de Buenos Aires en detrimento de la distribución al resto de las provincias, o al fallo de primera instancia contra la ex Presidenta a la par del cierre masivo de causas contra el ex Mandatario de la alianza Cambiemos.
En ese camino sigue irresuelto el escenario en la Cámara de Diputados, donde el diálogo sigue roto luego de la escandalosa sesión del 1 de diciembre. En aquélla jornada, el Interbloque Federal, el bloque Provincias Unidas y el Frente de Izquierda, dieron quórum en el recinto para el tratamiento de un temario que incluía la creación y nacionalización de ocho universidades, entre ellas la Universidad Nacional Juan Laurentino Ortíz para nuestra provincia. La situación del Consejo de la Magistratura, con un ojo opositor puesto en el capital electoral, terminó por obstaculizar el desarrollo de la sesión y los bloques minoritarios decidieron levantarse de sus bancas. Se intentó tender puentes en los primeros días de la semana con el propósito que el jueves pasado se realice una sesión especial pero los resultados fueron negativos. Con esa intención, por estas horas hay negociación abierta para que el martes 20 de diciembre se concrete, pero parece complicado por la polarización entre el Frente de Todos y Juntos por el Cambio, en un tablero de ajedrez preelectoral. Con varios proyectos que pueden perder estado parlamentario, el apuro principal pasa por la aprobación de una Ley que ratifique el acuerdo con Estados Unidos sobre el intercambio de información financiera que requiere una normativa sobre blanqueo de capitales.
Definiciones en la provincia
El martes pasado, de manera unánime, el Senado entrerriano dio tratamiento sobre tablas y sancionó por unanimidad el proyecto con media sanción que modifica las reglas de juego electoral y que posibilita que el Poder Ejecutivo elija un desdoblamiento de los comicios nacionales, con un calendario que fija las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) el 30 de julio y la votación general el 24 de septiembre. Con los dos precandidatos opositores lanzados, los diputados nacionales Rogelio Frigerio y Pedro Galimberti, luego de la definición sobre la posibilidad de desacople de las fechas, a tono con los plazos establecidos por el Gobierno nacional sobre resultados económicos, especialmente vinculados a la inflación y el poder adquisitivo, al interior del oficialismo provincial se esperaban otras decisiones, relacionadas a las candidaturas, la libertad de internas y la inclusión de las minorías.
El gobernador Gustavo Bordet, en una entrevista radial con Radio Ciudadana de Concordia, analizó el panorama nacional y explicó que “el hecho que Cristina diga que no será candidata genera diferentes acciones que tienden a ir buscando la mejor alternativa del Frente de Todos, que contempla distintos posicionamientos”. Además resaltó que lo importante “es conservar la unidad del frente con la plena participación de los actores”. En un fragmento de la nota, realizó declaraciones sobre el escenario local y destacó que su objetivo político está centrado en Entre Ríos. “Quiero ser un actor clave en unificar una propuesta en Entre Ríos para poder llevar a la victoria a nuestro espacio político. Estaré en el lugar que sea más conveniente, en la lista de diputados o lo que fuera, para que en Entre Ríos tengamos la tracción necesaria para ganar las elecciones”, explicó el Mandatario, sobre la posibilidad de asumir una candidatura idéntica a las elegidas por Jorge Busti y Sergio Urribarri cuando dejaron el sillón de Casa Gris. “Llegado el tiempo, definiremos una fórmula, habilitaremos un proceso de elecciones internas, para que todo el mundo pueda competir. No tengo ninguna duda que vamos a ganar en Entre Ríos”, apuntó.
El intendente de La Histórica, Martín Oliva, también se refirió a los pronósticos electorales en la provincia y destacó “que la diferencia no es lo que dicen las encuestas”. Recordó la elección de 2015 con una gran paridad y explicó que “eso va a volver a suceder”. “Con el trabajo que nosotros vamos a hacer y cuando nuestros vecinos sepan quien es la persona que en nuestro espacio político va a ofrecerles la garantía de muchas de las cosas que se vienen haciendo tanto en mi ciudad como en la provincia, las cosas van a ser diferentes”, detalló el Presidente municipal de Concepción en referencia a que el tablero actual solo tiene confirmado los precandidatos de Juntos por el Cambio. Habló de varios nombres importantes de la ciudad, pero destacó a José Lauritto, Marcelo Bisogni y Carlos Schepens por la experiencia y la gestión que pueden aportar, aunque advirtió que la lapicera la tiene el Gobernador.
En las declaraciones de Bordet no hubo nombres propios pero sí una mención a “intendentes, la vicegobernadora y ministros”, en una clasificación que engloba a Adán Bahl, Martín Piaggio, Enrique Cresto, Laura Stratta y Juan Bahillo. Tal vez la principal incógnita sigue siendo si la mejor fórmula es llevar candidaturas fuertes en las intendencias para que arrastren votos hacia una única boleta para la categoría principal o generar un proceso de internas abiertas que se complementen y potencien una lista ganadera. Quienes conocen al Mandatario reconocen que la primera opción siempre fue la preferida, aunque eso no resulta incompatible con la habilitación a que juegue quien quiera. Lo que manifiesta en todo caso es que el Gobernador tendrá su binomio elegido, con todo el apoyo de la estructura. Los próximos cuatro meses, además del desenlace económico, será un camino de definiciones sobre esa definición, el formato electoral y las candidaturas.