Los jubiladores reclamaron por la defensa de sus conquistas

El acto se concretó a las 10:30 en plaza Ramírez.

A la protesta en plaza Ramírez se sumaron también los docentes.

Los jubilados autoconvocados y activos llevaron a cabo ayer un cartelazo frente a la pirámide de la plaza General Francisco Ramírez. La medida se efectuó por la mañana en adhesión a la jornada nacional de protesta del sector que tuvo su epicentro en la Capital Federal con la caminata hacia el Congreso de la Nación. La convocatoria -que tuvo como oradores a Hugo Lorenzatto, del Plenario de Trabajadores Jubilados (PTJ), y a Jimena García, de la Agrupación Docente Fuentealba, surgió en el plenario nacional de organizaciones de jubilados -activistas y luchadores-, en “la defensa por la conquista histórica del 82 por ciento móvil, y la demanda para que las Cajas sean dirigidas por los trabajadores y para que ningún gobierno pueda tener injerencia en ellas”.
De acuerdo a lo expuesto, la preocupación está “en los proyectos de ley, que están por discutirse en la Bicameral, respecto a cómo se modifica la movilidad para perjudicar aún más al sector después de verse afectado por las disposiciones de anteriores gestiones”. En este sentido, se anticipó que “la intención (del Gobierno) es armar una fórmula, cuya movilidad depende de la recaudación. Si se tiene en cuenta la depresión y la recesión económica, ante la pandemia, todo hace presumir la caída de los salarios. Al mismo tiempo se discute pasar el Fondo de Sustentabilidad de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) al ámbito de Economía con lo que ya no tendría que ver más con los jubilados”. “Es un ataque en regla y brutal para eliminar el carácter de salario diferido que los jubilados defendemos”, se aseveró.
Por su parte, desde la Agrupación Fuentealba se manifestó que dentro de las reivindicaciones de las 72 horas de la desconexión virtual está la lucha por el aumento salarial al básico, ya que es “la única forma que la mejora vaya para los jubilados”.
También se reclama por “la derogación de la ley de emergencia, que significó una reforma de la ley jubilatoria. La magnitud del ataque es tal que, si nos quedamos en casa, hasta que pase la cuarentena, cuando volvamos no sólo perderemos los salarios sino también una conquista histórica del movimiento obrero como es la jubilación con el 82 móvil que quieren sea reemplazada por un subsidio a la vejez”.