La UIER reveló que hubo un repunte en los sectores no esenciales dado algunas habilitaciones provinciales.
La Unión Industrial de Entre Ríos (UIER) desarrolló una nueva encuesta en junio para relevar el nivel de actividad de los distintos sectores productivos de la provincia, que vienen manifestando diversas realidades en medio de la pandemia. Del estudio realizado se observa un leve repunte de sectores no esenciales que debieron paralizar su producción por la cuarentena, aunque persiste una gran incertidumbre de cara a los próximos meses, ante un escenario extremadamente dinámico y complejo.
Durante el sexto mes del año, los rubros esenciales pudieron continuar trabajando sin interrupciones, cada uno con sus distintas particularidades sectoriales y con mayor capacidad para sobrellevar la situación. Mientras tanto, algunos establecimientos de rubros no esenciales registraron un cambio de tendencia favorable que generó un alivio para sostener las empresas en tiempos críticos, sobre todo tras enfrentar una profunda caída de los niveles de producción y ventas.
En relación a este último aspecto y de acuerdo a las consultas efectuadas a los representantes de las industrias entrerrianas, desconocen si el repunte registrado por las empresas consideradas no esenciales responde a una mejora real en la situación económica o si se trata de un rebote temporal luego de haber registrado un histórico párate en medio de la pandemia. Por este motivo, los empresarios son cautos a la hora de realizar previsiones para los próximos meses. En este contexto, si bien la mayoría de los establecimientos fabriles pudo abonar los sueldos y el medio Salario Anual Complementario (SAC) durante el mes de junio, muchas de las empresas comprendidas en los rubros no esenciales debieron recurrir a distintas alternativas de financiamiento, la ayuda del Estado a través del Programa de Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP), pagos en cuotas y el uso de recursos propios.