La Fragata Libertad regresó al país tras completar su 53° viaje de instrucción

La Fragata ARA Libertad arribó este domingo por la mañana al Puerto de Buenos Aires, culminando así su 53° Viaje de Instrucción tras casi seis meses de navegación y 22,000 millas náuticas recorridas por América y Europa.

El buque escuela de la Armada Argentina, con 270 tripulantes a bordo, regresó oficialmente a su base en Puerto Madero después de una travesía que se extendió por 22,000 millas náuticas. Entre los tripulantes se encontraban 51 guardiamarinas en comisión de la Escuela Naval Militar, todos bajo el mando del capitán de navío Roberto Ariel Gestoso.



La Fragata Libertad había partido el 7 de junio inicialmente con destino a Recife, Brasil, donde los guardiamarinas participaron en actividades culturales y de intercambio. Desde allí, el buque emprendió su primera travesía transatlántica hacia Europa, navegando durante 21 días hasta llegar a Ferrol, España, tras superar más de 3,600 millas náuticas de océano abierto.

Uno de los hitos históricos de este viaje fue la primera visita de la fragata a Noruega en toda su historia. Durante su escala en Kristiansand, la embarcación participó en la Tall Ships Race 2025, la prestigiosa regata internacional que reúne a grandes veleros de todo el mundo. Posteriormente, la nave continuó hacia Hamburgo, Alemania, donde en una jornada de puertas abiertas recibió a 5,000 visitantes y se realizó una ceremonia en homenaje a los tripulantes del submarino ARA San Juan.

El itinerario europeo incluyó además escalas en Ámsterdam, Países Bajos, y Lisboa, Portugal, que constituyó el último puerto europeo antes del segundo cruce del Atlántico. Esta segunda travesía oceánica demandó más de 20 días de navegación ininterrumpida hasta alcanzar Puerto Limón, Costa Rica.

En Baltimore, Estados Unidos, la fragata fue recibida por el jefe de la Armada Argentina, almirante Carlos Allievi, marcando el cumplimiento de los primeros 96 días en altamar y más de 16,000 millas náuticas recorridas. La travesía continuó hacia Santo Domingo, República Dominicana, donde las actividades programadas debieron suspenderse debido al paso de la tormenta tropical Melissa.

La última escala internacional antes del regreso a Argentina fue Fortaleza, Brasil. Desde allí, el buque retomó rumbo sur para emprender el tramo final hacia Puerto Madero. A su llegada a Buenos Aires pasadas las 9 horas, un gran número de familiares y amigos esperaba a los tripulantes, produciéndose emotivos reencuentros caracterizados por lágrimas, abrazos y manifestaciones de emoción tras la extensa travesía.