Las alumnas se abrazan frente a un monumento improvisado para las víctimas de la masacre ocurrida el lunes en la escuela Covenant, en Nashville, EE.UU. El ataque fue el decimonoveno tiroteo en una escuela o universidad estadounidense en lo que va de 2023, y el más mortífero desde el ataque de mayo en Uvalde, Texas, que dejó 21 muertos. Seis personas murieron en la Covenant School, una escuela cristiana privada en la que estudian unos 200 alumnos desde preescolar hasta sexto grado. La escuela es un ministerio de la Iglesia Presbiteriana Covenant, y la atacante, Audrey Elizabeth Hale de 28 años, quien murió durante un intercambio de disparos con la policía en el segundo piso de la escuela fue estudiante del establecimiento. Al momento de ser abatida, portaba dos rifles de asalto AR-15 y una pistola 9 milímetros, con los que asesinó a tres niños de 9 años y tres adultos, e hirió a varias personas, incluido un policía.