Los espectadores se refrescan durante el torneo de tenis Australian Open, en Melbourne Park. El Abierto de Australia introdujo en 2019 la regla de “calor extremo”, un año después de que Novak Djokovic y Gael Monfils se enfrentaron en unas condiciones abrasadoras que llevaron a ambos deportistas a expresar su preocupación por las políticas del certamen. Ahora, la llamada Escala de Estrés Térmico proporciona directrices claras que deben seguirse en caso de temperaturas ardientes en la pista. Los organizadores del torneo se atienen a las recomendaciones científicas asociadas a cada rango de la escala que va del 1 al 5. Los cuatro elementos que dictan los resultados en la escala son: temperatura del aire, calor radiante, humedad y velocidad del viento. El 1 denota condiciones de juego templadas y el 5 establece la obligatoriedad de la suspensión de la competencia la peligrosidad latente para los atletas.
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