Una turista retrata la atiborrada y colorida fachada de un negocio de artículos regionales en la ciudad de Ráquira, un pueblo ubicado a 180 kilómetros al norte de Bogotá. Ráquira (“Pueblo de ollas”, en el idioma chibcha) es una de las ciudades más antigua de Colombia y la Capital Nacional de la Artesanía. La abundante producción alfarera y cerámica -que se remonta a la era precolombina y dio origen a su nombre-, junto a la calidad artística de los objetos de cestería, tallas y tejidos, entre otros, le han otorgado un merecido reconocimiento internacional. En este territorio la población vive en un 90% de la artesanía, sin embargo, les llevó décadas antes de que el gobierno nacional admitiera la “denominación de origen” de sus productos, lo que acrecentó no sólo su prestigio y ganancias, sino también al turismo. Colombia es actualmente el país de América Latina con mayor número de denominaciones artesanales de origen, con 11. La siguen México con tres y Perú con una.