Agentes de seguridad atrapan al sospechoso de haber asesinado al ex primer ministro de Japón, Shinzo Abe, mientras pronunciaba un discurso de campaña frente a la estación de trenes de la ciudad de Nara, al oeste del país. El dolor y la incredulidad invadieron este viernes al pueblo japonés, conocido por su estricto control de armas. Shinzo Abe, de 67 años, era una destacada figura política y el primer ministro más joven de Japón en la era de posguerra. Las autoridades del hospital donde fue internado tras el ataque anunciaron que el ex primer ministro “sucumbió a sus heridas», luego de ser tratado durante más de cinco horas. Abe sufrió heridas en el cuello y el pecho cuando un hombre de 41 años, que ahora se encuentra detenido, le disparó con una escopeta casera. Japón celebrará las elecciones del Senado este domingo y Abe se encontraba haciendo campaña por los candidatos del partido gobernante.