Dos vacas de raza herens, conocidas por su agresividad, traban los cuernos durante la ronda de clasificación para las finales nacionales de peleas de vacas, en el cantón de Valais. Cada año, en primavera, cuando son llevadas a los pastos alpinos, las vacas prueban su fuerza y luchan por el liderazgo del rebaño. La competencia continúa hasta que una nueva reina obliga a todas las demás vacas a retirarse. Las herens gozan de especial consideración en Suiza por ser una raza autóctona. Los estudios científicos han demostrado que ya habitaban esa región antes de que llegaran los celtas, pueblo de origen indogermánico que extendió sus dominios por Europa central, las Galias, España y las Islas Británicas, hasta ser absorbidos más adelante por los romanos. La gran final se lleva a cabo a principios de mayo desde 1922 y sirve como un recordatorio de la importancia de la agricultura en la historia del cantón.