Un niño retira pan recién horneado en una panadería de El Cairo, Egipto, donde el costo de la tonelada de trigo ha aumentado un 30% desde que comenzó la guerra en Ucrania. Los precios de los alimentos ya estaban subiendo antes de la invasión rusa, pero ahora el pan, un alimento básico y políticamente simbólico, se está volviendo más caro a medida que las exportaciones en el Mar Negro se ven interrumpidas. Las familias llevan soportando años de austeridad, en un país donde un tercio de los 103 millones de habitantes viven por debajo del umbral de la pobreza. Egipto es el mayor importador de trigo y compra más del 60% el extranjero, especialmente en Ucrania y Rusia. Un intento de aumentar el precio del pan en 1977 provocó graves disturbios; mientras que el expresidente Hosni Mubarak enfrentó una violenta ola de protestas en 2008 por la escasez de trigo. El canto principal del levantamiento que lo derrocó fue: «Pan, libertad y justicia social».
