Un koala animatrónico que mide unos cuatro metros, emite gemidos y desprende columnas de humo de su piel chamuscada, preside las protestas de los activistas ambientales, en Melbourne, Australia. La marcha se produjo este jueves después de que el gobierno del estado de Victoria difundió una investigación propia sobre el deterioro del ecosistema y anunció algunas medidas para revertirlo. La investigación presentada ante el parlamento demandó dos años y describe que las especies nativas han disminuido en número y distribución. Cerca de 2.000 animales, árboles y otras especies vegetales se encuentran en riesgo de extinción, un aumento alarmante respecto de los 700 que se identificaron hace 5 años. Las principales amenazas son el cambio climático, los incendios forestales, las especies invasoras como los gatos y las ratas, el desmonte para la ganadería y las modificaciones de ríos y humedales.