Un hombre trabaja en el glaciar Ródano, que aparece parcialmente cubierto con espuma aislante para evitar que el hielo se derrita debido al calentamiento global. El glaciar Ródano, un popular destino turístico, se ha encogido unos 30 metros en los últimos 10 años. Según el Grupo Intergubernamental de Expertos en Cambio Climático de la ONU (IPCC), dos tercios del hielo en los glaciares de los Alpes están condenados a fundirse a finales de siglo. Los investigadores dijeron que esto tendrá un gran impacto en la disponibilidad de agua para la agricultura y la producción de energía, ya que en este país el 60% de la energía eléctrica es de origen hidráulico y casi el 40% restante de centrales nucleares. Ambas están amenazadas: la primera, porque ya se explota al máximo de su capacidad sin dañar el caudal ecológico; las segundas, porque precisan gran cantidad de agua para su refrigeración.