Ntando Mahlangu, de Sudáfrica, celebra al ganar la medalla de oro en salto en largo, batiendo un nuevo récord mundial en el Estadio Olímpico de Tokio.
Los Juegos Paralímpicos 2020 otorgarán 539 medallas de oro, entre 4.500 atletas.
Son una recordación de que el deporte, pero también la discapacidad, pueden ser una poderosa fuente de inspiración para lograr un cambio personal y social.
Un cambio que acabe con la desigualdad ignominiosa que sufren, por caso, el 70% de los niños discapacitados del continente africano, donde no tienen acceso a una educación decente.
Mahlangu nació con hemimelia, una condición que impide que la parte inferior de la pierna se desarrolle.
Pasó su infancia en silla de ruedas hasta 2012, cuando decidió que se las amputaran, y fue entonces cuando le regalaron su primer juego de prótesis.
En Japón aprendió la expresión “wabi-sabi” (Hacer la perfección a partir de la imperfección), lo primero que dijo al subir al podio.










