La “Fase 2″ del plan de Caputo lo obligará a conseguir un superávit fiscal mayor

El Tesoro deberá lograr un resultado positivo de $2 billones mensuales, lo que implica repetir cada mes un saldo primario de las cuentas públicas en torno a 0,4% del PBI

Caputo se autoimpuso una estrictísima disciplina fiscal
Gustavo GavottiCaputo se autoimpuso una estrictísima disciplina fiscal Gustavo Gavotti

En una conferencia de prensa que no calmó ninguna de las principales ansiedades del mercado sino que simplemente apuntó a posponerlas, el ministro de Economía, Luis Caputo, y el presidente del Banco Central, Santiago Bausili, anunciaron la segunda fase de su plan económico, consistente en “la emisión cero” y terminaron de atar su suerte a un muy exigente desempeño fiscal.

Ambos funcionarios informaron el mecanismo que se negociará con los bancos a partir del lunes para consolidar la liquidez de los pases en una letra administrada por el Banco Central, que fijará el nivel de tasa de interés, pero que será emitida por el Tesoro, que deberá hacerse cargo del pago de esos intereses.



Esa decisión, similar a lo que ocurre en otros países, incluido Brasil, implicará un esfuerzo mayor para el buen desempeño de las cuentas públicas. De acuerdo a los cálculos preliminares de los analistas, el superávit primario necesario para sostener este esquema debería mantenerse entre 0,4% y 0,5% del PBI. Para dimensionar el esfuerzo, en mayo, el superávit primario se ubicó en torno al 1% del PBI, lo cual marca el ambicioso objetivo de ahorro adicional que se autoimpuso el Gobierno.