La engañosa retórica del segundo tiempo

Señor director:
Argentina ha sufrido y sigue sufriendo las consecuencias de los desaciertos concertados entre el poder real local e internacional cuyo empleado, operador y declinante principal fue el ex presidente Macri y los responsables de las decisiones financieras, incluido el FMI (no olvidemos el desembolso a los fondos buitres remanentes sin ninguna negociación ante el juez Griessa y la fuga de capitales de aproximadamente 86.000 millones de dólares orquestada en perjuicio del país), sobre las cuales el actual gobierno efectúa malabarismos de distintas naturaleza para tratar de superarlas y encaminar al país económicamente y financieramente.
Aunque la pandemia actual del covid-19 vino a ocultar en parte la gravedad escandalosa de la gestión Macri poco a poco se va desentrañando al entramado de nula transparencia en toda su crudeza.
Dentro del panorama señalando la solidez económica y financiera del ex presi Macri y su séquito de beneficiarios les permite mostrarsea su manera para decirnos que quieren un segundo tiempo con patrones de estancia caprichosos.
Esta veleidad está alimentada por planteos, en algunos casos, inentendible y en otros basados en ataques superficiales al populismo o al kirchnerismo o adoptado una forma extravagante y solidaria sin mayores contenidos. Paulatinamente los radicales que conservan su identidad histórica se alejan del personaje Macri y sus propuestas reaccionarias. Si los excluidos, vulnerables o marginales y la clase media más esclarecida, por candor o imbecilidad no alcanzan a percibir o vislumbrar la repeticiónde la entrega y colonización de nuestros recursos mediante la mentira y mueca repulsiva de que alcanzaremos “la pobreza cero”, “la inflación no es problema”, “la destrucción del apartado productivo”, “el sometimiento a la deuda externa impagable”, “el desmantelamiento y utilización del Poder Judicial operando en favor de la persecución política y los negocios”, “el dogma económica del libre mercado”, donde la patria es del campo, el resto rindiendo para pagar los negocios de los empleadores no saldremos jamás.
Si no nos damos cuenta de quienes son los que actúan como instrumentos del capital financiero en beneficio de unos pocos, impidiendo el desarrollo industrial tecnológico nacional, siguiendo sus propias lógicas de construcción política ajena a los problemas del pueblo y del país es decir, sin importarles las desigualdades sociales no adoptaremos la mejor solución ni en el corto ni en el menor plazo.
Esto se asemeja a un pacto suicida en que las reglas las fijan quienes conocen su forma autodestructiva y quiénes por ignorancia y atracción fatal aceptan morir con la convicción de pertenecer al grupo de politiquillos que eligen a la política como profesión muy lucrativa como una especie de continuidad de sus negocios personales, sin ideales, valores o normas de contenido normativo.
Aldo Savina

RESUMEN DEPORTIVO