Desde la Seccional Uruguay de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer) se rechazaron las declaraciones de funcionarios provinciales que “en una actitud claramente antiobrera, pretenden deslegitimar la lucha y llevar adelante acciones persecutorias contra las trabajadoras y trabajadores que ejercen su derecho constitucional a huelga”.
“Debe quedar claro que la docencia entrerriana exige a la patronal una recomposición salarial que le permita recuperar el poder adquisitivo perdido en los últimos años. La propuesta replica los porcentajes acordados en la paritaria por Ctera con la Nación, pero se olvida que, en los años anteriores, los aumentos salariales en Entre Ríos quedaron por debajo de la inflación y porcentualmente también por debajo de los acordados por la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (Ctera)”, se añadió. “Claramente trabajadoras y trabajadores docentes por mayoría decidieron rechazar esta propuesta haciendo los máximos esfuerzos hasta el pasado sábado 26 de febrero para llegar a un acuerdo. Exigimos al Gobernador que se ponga al frente de la negociación salarial y reciba a los trabajadores y efectúe una propuesta con las demandas que ya fueron presentadas”, se sostuvo.
De la Fuentalba
Por su parte, Fernando Arregui, integrante de la Comisión Directiva de Agmer por la Fuentealba, expresó que “un aumento en cuotas llevaría el salario inicial de un docente a los 61 mil pesos en abril, cuando en ese mes la línea de pobreza superará largamente los 80 mil pesos”.
“Incluso, en medio de la pandemia, cuando el estado no entregó insumos necesarios como conectividad, computadoras, wifi en los barrios, etcétera, fuimos los/as docentes junto a las familias los que mantuvimos los vínculos pedagógicos. Nosotros/as los/as docentes, hemos decidido no ceder a las extorsiones y nos disponemos a luchar por salir de la pobreza”, se indicó.










