Se conmemoró ayer el Día Mundial de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja en adhesión al nacimiento de su fundador, Henry Dunant. El objetivo es el de reconocer la encomiable labor de voluntarios y empleados que todos los días salvan vidas, ayudan a los más desfavorecidos y cambian mentalidades. Se trata de la red humanitaria más grande del mundo.
Cuenta con empleados y voluntarios que, desde las comunidades, ayudan a las personas más necesitadas y vulnerables, aquéllas que viven en países con pocos recursos sanitarios y económicos, que han sufrido de primera mano alguna catástrofe climática o como consecuencia de guerras, refugiados y desplazados.
También actúan en las ciudades, en los barrios más marginales. Su emblema de la Cruz Roja sobre fondo blanco es reconocido en todo el mundo como símbolo de ayuda humanitaria y suele ser respetado en todas las circunstancias, para que puedan desarrollar su labor en países en conflicto.
Henry Dunant era un banquero suizo que, mientras se dedicaba a sus negocios en Argelia, viajó al norte de Italia en el mismo momento en que allí se enfrentaban los ejércitos austriaco, francés y piamontés. Al anochecer, visitó el campo de batalla de Solferino, el 24 de junio de 1859. Allí yacían 40.000 hombres prácticamente abandonados a su suerte.
Dunant vio morir a muchos hombres sin asistencia de ningún tipo, y, ayudado por gente de las poblaciones cercanas, se dedicó a socorrerlos y atenderlos, sin importar de qué bando eran, usando el lema: ‘Tutti fratelli’ (Todos hermanos) acuñado por las mujeres de la cercana Castiglione dello Stiviere. Quedó tan impresionado por esa experiencia que 3 años después publicó sus reflexiones para ayudar en situaciones parecidas, en un libro titulado Un recuerdo de Solferino. Un libro que fue el germen de la Cruz Roja. Allí donde hay una necesidad de cubrir necesidades humanitarias se puede encontrar a esa organización.
Algunos de los eventos más importantes son los siguientes: desastres naturales: búsqueda y rescate de personas, atención pre-hospitalaria, abastecimiento de agua y alojamiento de personas necesitadas; preparación para desastres: recolección de ropa, juguetes, medicamentos y alimentos, primeros auxilios y donaciones voluntarias, entre muchas.