Martín Oliva tuvo a su cargo el mensaje de bienvenida, en el que destacó los objetivos que persigue su administración. “Trabajamos con mucho empeño para que ésta pueda ser una ciudad con desarrollo, bienestar, progreso y justicia social. Que crezca, extienda, que cada día genere más oportunidades, y que –a su vez- garantice más derechos”, reseñó.
Gustavo Bordet recordó la fecha del 3 de febrero a la que enlazó con la realidad por la que atraviesa el Palacio San José. En tal sentido, aseguró que “fue sistemáticamente abandonado en la gestión anterior, por lo que ahora debemos hacer un esfuerzo grande”, refiriéndose a la futura puesta en valor.
Las palabras de Alberto Fernández estuvieron orientadas hacia la necesidad de unidad. Al respecto remarcó la voluntad de su gestión de no excluir a nadie. “No hay un solo municipio en toda la Argentina que no haya recibido obra pública”, afirmó. Y, apelando a la recordación de un nuevo aniversario de la Batalla de Caseros, expuso que “es un día propicio para que, pensando en esa batalla, tratemos de hacer algo por terminar con las divisiones”.
Defendió todas las iniciativas encaradas durante la pandemia, en favor del turismo y reveló que la explosión del sector quedó evidenciada en los 22 millones de argentinos que durante 2022 visitaron algún lugar del país. Pero, quizá, entre los detalles más importantes, debe resaltarse la voluntad de recuperar la casa de Urquiza, donde funciona hoy el Correo.
Dirigiéndose a Oliva, sentado a su derecha, el Presidente fue muy explícito: “Vamos a volver a la casa donde vivía Urquiza, se lo garantizo intendente”.