Dueños
En la historia moderna de Occidente ha sido muy común que un partido político o varios de sus dirigentes sean propietarios e inspiradores de un periódico. Lo innovador y llamativo es que un periódico sea propietario e inspirador de varios partidos y dirigentes políticos.
Geometrías no euclidianas
Al adentrarse en ese deslumbrante territorio de las matemáticas, el adolescente que fui se topó con un objeto inquietante: la cinta de Moebius. En la facultad supimos más tarde de Riemann y las geometrías no euclidianas, de la topología -esa rama que estudia cómo las formas geométricas mantienen inalteradas ciertas propiedades ante las transformaciones-, y de otro ejemplo más complejo todavía: la botella de Klein.
Todo el mundo sabe que la de Moebius es una cinta que tiene una sola cara; y la de Klein una botella que no tiene afuera ni adentro.
La oligarquía argentina nos recomienda su propia creación: una geometría política en la que no hay lado izquierdo y todo –oposición y oficialismo- es de derecha.
Poder de síntesis
En la novela “1984”, de George Orwell, los trabajadores del Ministerio de la Verdad buscan que el lenguaje de las mayorías se reduzca cada vez a menos palabras que expresen, lo más confusamente posible, una menor cantidad de conceptos. Explique el por qué y sus consecuencias en no más de ciento cuarenta caracteres.
Un mito funesto
Hay un mito muy pernicioso que proviene de endiosar al inmigrante de fines del siglo XIX y atribuirle, como virtudes, sus vicios y carencias; estableciendo que el individualismo y la falta de criterio colectivo es una gran cosa, que contrasta con la indolencia de los que ya estaban aquí, que esperarían vivir del sudor ajeno. Esa pedagogía, que antes sostenía la ética protestante y ahora el consumismo hedonista, es nefasta y más clasista que racista, aunque contenga ciertas pulsiones racistas en descendientes de europeos a los que se los recibió con la alfombra roja de la enseñanza escolar del ochentismo decimonónico.Un cóctel funesto en cabezotas cerradas y en gentes que quieren destruir las escaleras que los ayudaron a salir del pantano -a ellos, a sus padres, a sus abuelos- para que otros no puedan subirlas.
(*) Sergio A. Rossi