Hojas Sueltas… Somos agua

Virginia Busnelli
Especialista en nutrición 

Alrededor del 60% de nuestro cuerpo está compuesto de agua, es por eso que en este momento del año donde las temperaturas son más altas y perdemos mucho líquido es importante hablar sobre hidratación. Nuestro cuerpo posee muchos mecanismos para regular la hidratación interna, consumir agua nos ayuda a equilibrar la perdida causada por procesos normales como orinar, respirar y transpirar y nos asegura un nivel óptimo de hidratación, clave para un correcto funcionamiento metabólico y por ende para nuestro bienestar.
La deshidratación, por el contrario, hace que nuestro cuerpo no pueda funcionar con normalidad, complica numerosos procesos fisiológicos y puede acompañarse de síntomas como dolor de cabeza, falta de concentración, cansancio y complicaciones cardiovasculares.
Cuánta agua necesitamos por día va a depender de muchas cosas… nuestra edad, condición de salud, nivel de actividad física, donde vivimos, tasa de sudoración y más. Es por eso que la recomendación general de consumir 2 litros de agua al día puede variar, pero es una buena forma de guiarnos. Por ejemplo, cuando tengas sed, no quieras hidratarte con bebidas azucaradas y menos con alcohol. Intentemos darle al cuerpo lo que necesita, estas otras bebidas nos suelen aportar mucha azúcar. El alcohol una sustancia toxica que colabora con la deshidratación.
La sed es nuestro radar más importante, nos avisa que necesitamos hidratarnos, pero a veces la rutina, el trabajo y la falta de conexión con nuestro cuerpo nos lleva a que escucharlo sea tarea difícil o a veces, cuando me di cuenta, ya tengo mucha sed y estoy muy deshidratado.
Aunque la necesidad de agua es diferente en cada persona, 2 litros es una buena decisión.
Iniciar el día con agua, antes de ingerir cualquier tipo de alimento, es clave para reponer perdidas de líquidos y empezar el día de la mejor manera. A su vez es recomendable tomar un vaso de agua antes de las cuatro comidas, con esta práctica ya te aseguras consumir una gran cantidad del agua que necesitas. Hay muchos alimentos que nos ayudan a estar hidratados durante el día: agregá muchas frutas y verduras en tus comidas.
Atención con las horas más calurosas del día, intentá no salir a hacer actividad física o exponerste al calor en esos momentos, si lo haces compensálo con ¡más hidratación!

(*) Médica especialista en nutrición con orientación en obesidad.