
Encontraron otros bultos con droga en las inmediaciones de la Estancia Santa Rosa. Sospechan que la red tendría un socio local.
El hallazgo de 43 kilos de cocaína (valuados en 430.000 dólares) que se produjo el miércoles último en una estancia del departamento Uruguay, en inmediaciones de colonia Sagastume, empieza a tener ramificaciones que alcanzan a narcotraficantes de Corrientes, vendedores y uno o más socios que operarían en Concepción del Uruguay.
Mientras circulaba la noticia de que peones rurales habían encontrado droga oculta, la Policía de Entre Ríos siguió con sus labores en la zona para intentar dar con dos sospechosos que fueron vistos en el lugar pero que se escondieron en la densa oscuridad del campo y acabaron escapando por un arroyo cercano.
Segundo y tercer descubrimiento
Este jueves, a unos 400 metros del lugar donde los peones que se disponían a trillar un campo de la Estancia Santa Rosa, encontraron una bolsa de arpillera plástica con 40 envoltorios de cocaína, los uniformados descubrieron otros dos bultos más con la misma sustancia. Luego, cuando fueron peritados, se constató que el nuevo hallazgo alcanzaba los 5,5 kilogramos.
Al cierre de esta edición, LA CALLE pudo confirmar que los trabajos en la zona rural mencionada continuaban, con la intención de relevar indicios y materiales probatorios que contribuyan a dar con la banda de narcotraficantes.
Según la hipótesis que ha ido ganando más fuerzas con el correr de las horas, la droga encontrada hasta el momento y cuyo valor sería superior a los 500.000 dólares, habría sido arrojada desde una avioneta en un punto exacto de la Estancia Santa Rosa, donde sería recogida luego por un tercero. El método es el habitual en este tipo de ilícitos y que se han podido conocer y desarticular en Ente Ríos a raíz de otros casos, como éste, desbaratados por el azar o la mala suerte de los narcos. Según la experiencia de los investigadores, una vez lanzados desde el aire, los bultos son levantados por otros socios o intermediarios, quienes luego se encargan de distribuir la sustancia ilegal por vía terrestre. Tercer hallazgo Durante estas maniobras, en la jornada del viernes, la fuerza de seguridad provincial realizó un tercer descubrimiento de cocaína, en esta oportunidad en un campo lindero y la cantidad quedó establecida en cinco kilos más.
De tal manera, la Policía logró decomisar hasta el momento 53,5 kilos de cocaína, valuados en 535.000 dólares en total. Una cifra muy relevante para la historia del narcotráfico en la zona, casi sin antecedentes inmediatos de los que se puedan dar cuenta. Seguramente, por el volumen de la fallida operación, no resultará difícil cuando lleguen a manos de la Justicia Federal los datos solicitados a los diferentes organismos de control, además de bancos y entidades crediticias, entrecruzar toda esa información y comprobar cuántas personas en esa ciudad pudieron realizar un movimiento de dinero tan importante en las últimas semanas. Porque está claro que reunir 50 millones de pesos para pagar más de 50kg de cocaína no es una suma que puedan reunir muchos contribuyentes. Pese a que según consignó una fuente a este medio, “los narcos de Paraguay que es de donde proviene por lo general este tipo de mercadería que llega a Entre Ríos, se paga al contado, a lo sumo en dos pagos: 50% por adelantado y el resto al contado”. Según la misma fuente, la Policía ya debe estar reforzando algunos controles y posible focos de botín porque cuando se desmorona un golpe como éste, hay alguien que pierde muchísimo dinero y no tarda en involucrarse en otro ilícito para intentar recuperar parte de lo perdido”.
La mención se corresponde con lo que sucedió en marzo de 2016 en un establecimiento rural cercano a Diamante, cuando el hoy condenado narcotraficantes y ex aportante de la campaña de Sergio Varisco, fue capturado luego de intentar al matrimonio Tulián en su campo para robarle una cuantiosa suma de dinero, que finalmente no tenían en sus manos. Se trataba de Daniel Tavi Cellis, un conocido narcotraficante de Paraná, quien resultó condenado a siete años y seis meses de prisión por intentar robar 12 millones de pesos, que era el supuesto dinero que tenía el señor Julio Tulián para paga un campo que tenía intenciones de adquirir. Al parecer, Cellis perpetró ese asalto, acosado por unas deudas ya que poco antes había perdido una suma millonaria por el malogrado intento de traficar droga con la misma metodología que parecer haber sido utilizada en Colonia Sagastume. Aquél caso y que terminó costándole una condena también al intendente de Paraná, Sergio Varisco, se conocieron como la causa de la “Narcoavioneta y el Narcomunicipio”.
Versiones extraoficiales
LA CALLE accedió a versiones que fueron vertidas off the records y que apuntan a que las personas que fueron vistas en primera instancia en la zona y que se dieron a la fuga, serían oriundas de la provincia de Corrientes y habrían tenido el rol original de trasladar la cocaína hasta un proveedor que posiblemente viviría en Concepción del Uruguay. Sin embargo, estos datos no han sido confirmados oficialmente, puesto que en el Juzgado y la Policía, existe un comprensible silencio con el fin que no se produzcan eventuales incidentes que obstaculicen la investigación.
Lo que sí trascendió es que se estaría trabajando en la posibilidad de reconstruir la hoja de ruta de la aeronave que habría transportado la droga. Para esto, es de vital importancia los datos que puedan llegar a brindar un control aéreo. Aunque hubo trascendidos respecto de que habría un radar que funciona durante ocho horas por día en el departamento Concordia y que tendría alcance hasta esta zona, fuentes del Ministerio de Defensa de la Nación consultadas para esta nota, lo negaron de manera rotunda. “El macrismo, con Patricia Bullrich a la cabeza sólo instaló un radar en sus cuatro años de gobierno. Y fue por exigencia del G20”, se señaló. Dicho radar, de acuerdo a lo averiguado por LA CALLE operaría en Villaguay.
Por último, si bien la fiscal del caso, Josefina Minatta, desligó de la investigación a los actuales dueños de donde aparecieron los 43 kilos, ya que habían realizado denuncias previas sobre movimientos nocturnos extraños y vuelos de avionetas, La Calle accedió a un dato que despierta interrogantes y parece ser algo sugestivo: el anterior dueño le había puesto de nombre “La Blanca”.
Por aire y por río
Carlos Noria, ex comisario general de la Dirección de Represión del Tráfico Ilícito de Drogas de la República Oriental del Uruguay, consultado recientemente por el diario El País, de España, declaró: “El modelo de negocios agropecuario y el de las drogas se complementan en esta región comparten acopio y rutas en la cadena de distribución”. Según el artículo, comparten también, “gerentes, peones, bancos, estudios jurídicos y medios de transporte.
La cocaína viaja junto a soja, arroz, carne, lana, vinos, incluso en montacargas. Somos un país agroexportador”, explica, y el narcotráfico “es una empresa comercial. Es natural que quieran camuflar sus embarques en la producción”.
- (Matías Dalmazzo – Fabián Vivot)









