▌Con una gran base de jugadores de la ciudad y otros provenientes de localidades vecinas el equipo conducido por Manuel Telis, que venía de caer en la antesala de una definición, se encontró con la chance de pelear por llegar a la segunda división del fútbol argentino debiendo enfrentar nada menos que a su clásico rival, Patronato de Paraná. Los recuerdos de ese equipo y esas dos finales en las voces de los protagonistas.
El “sargento” Daniel Giménez pide la pelota se lleva el silbato a la boca y marca el círculo central, decretando que en la tarde del domingo 4 de agosto de 1996 el Club Gimnasia y Esgrima alcanza la gloria a través de un grupo de trabajo muy genuino que le dio grandes satisfacciones a la institución, y se va camino a la segunda categoría del fútbol argentino.
Era un objetivo que durante muchos años había perseguido el Lobo y también este grupo de jugadores, y que llegaba de la mano de una readecuación del formato de la segunda categoría que le abría una chance que no desaprovechó, imponiéndose en dos verdaderas batallas por 2 a 1 a un duro y categórico Patronato de Paraná, clásico rival dentro de la provincia.
Un objetivo claro
Bajo la conducción del recordado Manuel “Gata” Telis y la preparación física de Omar Galcerán, ese grupo de jugadores donde se destacaban algunos de mucha categoría e infinitas batallas, salía a jugar a cada cancha buscando imponer condiciones y quedarse con la victoria. En casa el estadio Núñez siempre estaba repleto y era el equipo que movilizaba a la ciudad y la región dado que algunos de sus jugadores eran provenientes de Colón, Rosario del Tala y Concordia.
La Calle quiso recordar esa destacada gesta para el fútbol de Concepción del Uruguay a través de las voces de muchos de los protagonistas de aquel entonces. Seguramente que algunas faltarán, pero fue denominador común en el diálogo con ellos la valía de ese grupo de jugadores que más allá de las falencias y problemáticas que podían ir surgiendo siempre supieron trabajar para el objetivo de llevar a Gimnasia a lo más alto a nivel nacional.
Miles de kilómetros y anécdotas
Eran tiempos donde los grupos se construían dentro y fuera de la cancha, con los entrenamientos diarios y los miles de kilómetros en torneos verdaderamente largo y contra rivales sumamente fuertes y complicados en cada una de las provincias. Se viajaba en el día, se comía arriba del colectivo y allí se iban forjando las sociedades y amistades necesarias para todo grupo humano que pretende hacerse fuerte en pos de un objetivo como fue el recordado ascenso a la Primera B Nacional que Gimnasia y Esgrima logró aquel domingo 4 de agosto de 1996. El recuerdo de algunos protagonistas de aquella época de gloriapara el fútbol de Concepción del Uruguay.