A una semana de las elecciones legislativas, el Presidente volvió a cuestionar a su antecesor Mauricio Macri e hizo un mea culpa por no haber advertido el impacto psicológico que trajo aparejada la pandemia.
El presidente Alberto Fernández apuntó contra las grandes productoras de alimentos por el aumento de los precios y dijo que “hay que ponerles límites”, en una entrevista a una semana de las elecciones legislativas en la que volvió a cuestionar a su antecesor Mauricio Macri y en la que hizo un mea culpa por no haber advertido el impacto psicológico que trajo aparejada la pandemia.
“Tenemos que encarar el tema de la corrección de los precios con decisión, y tenemos que pararnos activa y firmemente frente a los formadores de precios. En los últimos años se consolidaron grandes monopolios en materia de producción alimenticia. Y hay que ponerles límites”, señaló en una entrevista con la agencia Télam. “Y es una pelea muy compleja, porque la Justicia suele ponerse del lado de esos poderosos”, añadió.
El jefe de Estado consideró que hay “que dar una lucha clara para que los salarios le ganen a la inflación”. “Necesitamos recuperar la caída de 20 puntos del salario real que se sufrió en la época de Macri.
Y tenemos que hacerlo en la calle, convenciendo a los vecinos, explicándoles que lo que les proponen del otro lado es entregarse al FMI y que el día que te despidan, nadie te pague nada”, manifestó.
Fernández volvió a cuestionar a Macri por decir que el problema de la deuda con el FMI lo arreglaba en cinco minutos: “No necesitó más de cinco minutos para endeudarnos del modo en que nos endeudó. Yo también puedo arreglar el problema de la deuda en cinco minutos: lo único que tengo que hacer es aceptar las condiciones que me ponen. Pero esa es la diferencia entre él y yo. No acepto esas condiciones. Porque sé que en lo que firme va a estar la suerte de generaciones de argentinos, no la suerte de mi gobierno”.
El Presidente consideró que la deuda fue adoptada “de modo absolutamente irresponsable e irregular” y dijo que su objetivo ahora es encontrar una solución, que no sea “a costa de postergar la solución de los problemas de los argentinos y argentinas” y que permita “garantizar condiciones de desarrollo y crecimiento”.
demás, hizo un balance de la situación del país tras la pandemia de coronavirus y dijo que “en parte se vive como una posguerra”. “Hay un sentimiento de sobrevivencia. Y está claro que en una Argentina que ha tenido 115.000 muertes ocasionadas por una sola causa, ese sentimiento es comprensible”, aseguró.










