Empresarios afirman que se requiere libertad para que los colectivos puedan circular junto a garantías.
El servicio de colectivos que une destinos en el interior de la provincia de Entre Ríos se encuentra paralizado desde la declaración de la emergencia por la pandemia en el país, hasta hoy, en más de 200 días de medidas restrictivas, el transporte provincial sólo circuló con un esquema de emergencia durante 11 días en junio. En el marco de una progresiva flexibilización de las restricciones, y con el objetivo de empezar a mejorar la situación de distintos rubros y actividades, los servicios de transporte provincial permanecen en la línea de largada a la espera de una pronta reanudación.
Con terminales desiertas esperan que durante este mes se reanude la actividad que une a los pueblos y ciudades entrerrianas. El titular de la Asociación Empresaria del Transporte Automotor (AETA) Leonardo Herlein sostuvo que “hay voluntad del gobierno provincial” por restituir los servicios, y para ello están trabajando de manera conjunta. Mientras en la provincia no hay servicio de colectivos dentro del territorio provincial, en otras jurisdicciones del país se prestan determinados servicios. Del mismo modo, hay localidades entrerrianas que impiden el acceso y circulación, lo que complica el regreso de estos viajes.
Sin embargo, más allá de la dependencia de la situación epidemiológica, incide en el avance la decisión del gobierno nacional para lograr una sintonía en términos interjurisdiccionales en torno a la pandemia.
“Esta actividad para retomar, en el arranque necesita la mayor cantidad de demanda posible, y si limitamos la demanda, que no pueden viajar las personas de riesgo, y solo lo esencial, es imposible conectar Buenos Aires con Mendoza, cuando no se puede parar o atravesar San Luis”, graficó sobre la situación interprovincial.
