La Escuela de Cerámica de Concepción del Uruguay (ECCU) celebra en este 2024 sus 40 años de vida. Los festejos se iniciaron con la apertura de una emotiva exposición en la biblioteca Alberto Larroque del Colegio del Uruguay Justo José de Urquiza en las que se exhibieron los trabajos de sus ex y actuales alumnos, a la vez que se acompañó la charla ofrecida en adhesión a su 175° aniversario de El Histórico.
“Se eligió el Colegio porque allí fue donde se originó y quisimos que fuese un encuentro entre los ex y los actuales alumnos. Para ello se acercaron muchas piezas, incluso por parte de familias de estudiantes que ya no están”, consignó a LA CALLE su directora, la profesora Carina Arévalo.
La docente comentó que de la mano de sus fundadores, los profesores de Cerámica Celeste Ansaldi y Artemio Alisio, la ECCU abrió sus puertas el 4 de abril de 1984 en el Colegio, bajo la rectoría del profesor Eduardo Julio Giqueaux.
En dicha institución funcionó hasta 1999, año en que se trasladó hasta la Sociedad Italiana La Benevolenza, sede en la que se dictan actualmente los talleres (de lunes a viernes por la tarde y los martes y los sábados por la mañana).
Asisten 127 alumnos en grupos reducidos, con el fin de dar un acompañamiento más personalizado. Para cursar no es requisito tener conocimiento previo, ya que hay distintos niveles.
Los encuentros están a cargo de un plantel profesional conformado por profesores de Artes Visuales, egresados del Instituto Superior de Formación Docente (ISFD) Doctora Carolina Tobar García, donde la Cerámica es una de las disciplinas artísticas enseñadas y desarrolladas. Jéssica Schaff, Ezequiel Alcobo, Wanda Landa, Berenice Artusi, Lucía González y Micaela Miranda.
Tras la gestión de Artemio Alisio y Celeste Ansaldi, Graciela Celesia de Díaz Vélez se hizo cargo de la dirección entre 2005 y 2015. La sucedió Silvana Gabriela Calzia –formadora en el Tobar García- hasta enero de 2023, año en el que asumió Carina Arévalo, quien trabaja en conjunto con sus colegas.
La ECCU surgió con el fin de revalorizar el arte de las culturas precolombinas y americanas, que trabajaron el engobe. Y, con el tiempo, se abrió a los intereses de los alumnos en lo que hace a la construcción, la decoración de las piezas y las pinturas, para continuar hoy con la fusión de nuevas técnicas.
