Es sabido que muchas personas están festejando los cumpleaños de los más pequeños, pese a que está prohibido por decreto presidencial. No es algo nuevo, ante la imposibilidad de alquilar salones de eventos, las familias optan por realizar festejos muy reducidos en patios de viviendas de grandes dimensiones. Pensando en esto, se podría implementar la posibilidad de realizar festejos de cumpleaños en plazas de la ciudad, al aire libre. Si permitimos que un mayor se siente en un bar a tomar algo, debemos encontrar la solución para los niños.
Gabriela Ramos
